Con fecha 22 de mayo de 2015, un grupo de concejales de la Municipalidad de San Carlos presentó una batería de acusaciones por abandono de deberes y otras denuncias por maltrato laboral en contra de quien fuera alcalde de esa comuna por 12 años, Hugo Gebríe.
La moción había sido presentada a la Contraloría General de la República, la que tras diversas investigaciones terminaron en los sumarios que significaron una serie de alegatos, los que vieron su última etapa en el Tribunal Calificador de Elecciones (Tricel), en Santiago, sede que el día de ayer resolvió suspender al apelado por un total de cinco años.
El Tricel, que tiene rango máximo en su tipo, por lo tanto no cabe apelación posible, dejó sin posibilidad alguna a Hugo Gebríe de optar a ningún tipo de cargo público desde la primera semana de enero del 2021, hasta enero del 2026, año en que el histórico jefe comunal sancarlino cumpliría 83 años de edad.
El edil renunció a su cargo en el mes de noviembre de 2020 para, según explicó- trabajar su candidatura como consejero regional por la Provincia del Punilla, lo que inmediatamente queda sin efecto tras esta condena.
Este es el tercer caso de destitución por parte del Tricel en Ñuble, desde que se creó la orgánica municipal vigente, siendo los primeros dos caso los de Johnson Guíñez (Pemuco) y Benito Bravo (Ránquil), en febrero y octubre del 2008. En ambos casos, por cargos de notable abandono de deberes.
En esta oportunidad, en cambio, hay otras materias que, paralelamente, se están investigando por parte del Ministerio Público, (negociación incompatible), las que también fueron ponderadas por el Tricel.
En total, fueron 19 los cargos formulados en su contra, de los que 14 fueron acogidos por el tribunal para resolver la suspensión.
“No hay nada que festejar”
Por tratarse de un proceso que pasó de la Contraloría General de la República al Tribunal Electoral Regional (aún en Concepción) y resolverse cinco años después en el Tricel a favor de los denunciantes, en el concejo municipal había satisfacción por la sentencia.
“Se hizo justicia. Lo que teníamos eran sumarios, investigaciones especiales -todas finiquitadas por la Contraloría-, resoluciones judiciales que afectaban al patrimonio de la municipalidad; teníamos reiterados informes de control que representaban de manera reiterativa acciones al alcalde, por lo tanto era imposible que esto terminara de otra manera”, sostuvo el concejal Mario Sabag.
A su juicio, dentro de las denuncias más graves “está la cantidad de despidos injustificados, y que le significaron millones de pesos a la municipalidad; y desde luego el haber comprado un terreno que luego pretendía venderle a la municipalidad”.
En tanto, para su par Jorge Silva, “no hay nada que celebrar, porque si bien se dieron los resultados que esperábamos, esto deja muy mal parada a toda la comunidad de San Carlos”.
El edil plantea que “lo que corresponde ahora es sacar lecciones de esto, en especial nosotros los concejales, quienes tenemos la obligación de fiscalizar lo que se hace y las decisiones que se toman en la municipalidad, y que los tiempos de la Contraloría, sean más acotados”.
