La mañana de este sábado la comunidad aledaña al Puente Santa Isabel, ubicado en el límite de El Carmen y San Ignacio, se reunió en torno a la estructura acompañada de autoridades comunales y parlamentarias. Juntos vieron los destrozos que está llevando a cabo la empresa a cargo de las obras del primero de 14 tramos en que está dividido el proyecto de reposición de la Ruta N-59-Q Chillán-Yungay.
Según datos históricos, su construcción data de finales de la década de los sesenta y por años sirvió tanto como medio de transporte como diversión para las familias del sector. Sin embargo, y pese a los recuerdos y nostalgias, la estructura no poseía ninguna protección patrimonial más que su aparición en el Inventario Nacional de Patrimonio Inmueble de Chile publicado en junio de 2022, lo que ha despertado el malestar de la comunidad y ha desatado campañas en redes sociales para detener su demolición.
Luis Valencia, gestor cultural e historiador de El Carmen señala que el puente se construyó 1964. “Se hizo para unir todas las comunas del sur de Ñuble partiendo por Chillán, San Ignacio, El Carmen, Pemuco, Yungay y Tucapel. Este puente se construyó bajo el plan de reconstrucción post terremoto de 1960. Tenía una longitud de 216 metros, 8 de altura y 7 de ancho y su materialidad es de concreto armado. Resistió los embates del terremoto del 2010, a pesar de lo que dice el Mop. Ellos hicieron un estudio con profesionales y tecnología de punta el año 2021. Al año siguiente el Mop publicó un inventario de Patrimonios Inmuebles entre los cuales está el Puente Santa Isabel. En el tomo II señala el resultado de este informe que el Puente estaba en buenas condiciones, salvo pequeños daños en sus barandas y en la calzada”.
El historiador añade que “el 2023 la ministra de Obras Públicas sostiene que el Puente Santa Isabel estaba al borde del colapso, situación que no cuadra en la lógica de los puntos anteriores. Yo presenté una solicitud de declaratoria al Consejo de Monumentos Nacionales el 5 de junio pasado porque la Seremi de las Culturas dijo que este documento no existía para protegerlo. Esto, más las acciones de un centro cultural de San Ignacio, el Gobierno Regional acogió el sentir de nuestra comunidad y elevó un documento oficial al Ministerio de Obras Públicas para que detuviera la demolición del puente, cosa que no ha ocurrido”.
“Este puente tiene 60 años de historia, representa identidad territorial para las comunas anexas donde se encuentra emplazado, esto es El Carmen y San Ignacio sobre el río Diguillín que es el límite natural de ambas comunas. En su eje principal ha servido para el desarrollo económico de las localidades del sur de Ñuble porque sirvió como nexo para que surgiera el progreso económico, agrícola, ganadero, forestal y de transporte público de distintas generaciones que hicieron uso de esta vía”, indicó Valencia.
El diputado Felipe Camaño fue uno de los parlamentarios que ayer acompañó a la comunidad para delinear posibles acciones y detener la demolición que presenta al menos un 35 por ciento. “Nos reunimos con vecinos preocupados por la demolición. Ellos cuentan que el 2017 comenzaron las gestiones para declarar patrimonio este bien inmueble. También advierten otro problema que tiene que ver son el diseño de la actual ruta porque no habría existido una correcta participación ciudadana. Hay mucha duda respecto al diseño, a la ruta, a cómo fue la participación ciudadana. Ellos dicen desconocer que el antiguo puente sería demolido. No han obtenido respuestas del seremi de Obras Públicas ni menos de la seremi de las Culturas, a pesar que ellos han solicitado audiencias”, señala a La Discusión.
Hace algunos días, el propio Camaño colgó un video en sus redes sociales denunciando la acción. La Seremi de las Culturas contestó a través del mismo medio advirtiendo que “el Puente Santa Isabel, a la fecha, no cuenta con solicitudes ingresadas a la Dirección Regional de Patrimonio Cultural o la Unidad Técnica del Consejo de Monumentos Nacionales de nuestra región y actualmente no posee ninguna declaratoria que lo resguarde”.
El diputado agregó que dejará los antecedentes en la Comisión de Obras Públicas. El diputado Cristóbal Martínez también se hizo presente este sábado en el destruido Puente Santa Isabel señalando que “la demolición está bastante avanzada y la comunidad nos expuso la historia del puente. Ellos están molestos porque consideran que no se escuchó a las comunidades. Desde mi vereda, como parlamentario, adquirí distintos compromisos. Considero que hay varios temas porque los materiales están cayendo al río y se está provocando una problemática medioambiental. También pediré a la Seremi de las Culturas que formule un informe sobre el patrimonio histórico y cultural y generar las instancias para trabajar con el Ministerio de Obras Públicas y aunar algún criterio para dejar alguna parte del puente como patrimonio. Me tocó en lo personal vivir este mismo tema con el puente de Pinto cuando yo era gobernador de Punilla. En aquella oportunidad se generó la misma situación y siento que debiera existir un mejor protocolo de comunicación con las comunidades”.
“La decisión fue consensuada”
La Discusión consultó a sobre la situación a la Seremi de Obras Públicas y quien contestó fue el seremi (s) Roberto Missene, quien dijo que la demolición del puente responde “a un informe técnico, incluido en el proyecto, del año 2016, que daba cuenta del peligro que representa el puente, por el deterioro que mantiene, recomendando su rápida reposición, ya que presenta un alto riesgo de colapso post efectos del terremoto del año 2010”.
Según la autoridad, esta situación se hizo saber a municipios, alcaldes y concejales; organismos técnicos, presidentes de juntas de vecinos y comunidad en general en las Participaciones Ciudadanas realizadas desde noviembre del año 2016. Ante esto, la Dirección Nacional de Vialidad del MOP determinó iniciar las obras de reposición de la ruta N-59-Q precisamente por el tramo IX, que incluía este puente, y no por el tramo I, ante la premura de proteger la seguridad y la vida de las personas que circulan por dicho puente y además mantener la conectividad vial ante el riesgo inminente de colapso que tiene el viaducto.
“En abril de 2021, se realizó un nuevo estudio a la estructura, que reiteró el deterioro del puente, con una vida útil de un 25%. Nuevamente en las Participaciones Ciudadanas, esta vez realizadas por la empresa que se adjudicó las obras, el primer semestre del año 2022, se hizo saber que el puente se iba a destruir para evitar un riesgo de colapso. Además, se informó mediante comunicado de prensa, que se destruiría el antiguo viaducto por razones de seguridad”, indicó el seremi.
Consultado respecto a la publicación inventario que define al puente como “patrimonial” Roberto Missene señaló que “el puente es parte del Libro Inventario Patrimonial Inmueble, en el que se incluyen todos los viaductos, así como también estructuras que en algunos casos ya no están presentes. En ningún caso el que una estructura esté en este libro, significa que es un patrimonio, pues dar esa categoría no es menester de nuestro ministerio”.
