Señor Director:
Muchos años llevamos ya con la preocupación por la paralización de proyectos agroindustriales en la Región de Ñuble, al no tener factibilidad eléctrica. Lo anterior se debe a problemas e inexistencia de líneas de
transmisión, que no tienen la capacidad para que la energía llegue al sistema de distribución.
La reciente exclusión de obras para expandir la transmisión eléctrica de nuestra Región, sorprende e indigna a quienes tienen iniciativas de emprendimiento, porque deberán descartarlas o relocalizarlas en otras
regiones, perdiendo con eso oportunidades de inversión, crecimiento y empleo.
En Ñuble hay cerca de 20.000 hectáreas plantadas con frutales y estas requieren energía eléctrica para
los sistemas de regadío y procesos agroindustriales, entre otros. Tenemos un potencial para superar en 5
veces las cifras actuales, pero no serán posibles de realizar por: falta de energía eléctrica para esos nuevos
proyectos y las decisiones de funcionarios públicos que desde Santiago definen cuales son las prioridades
en las regiones.
Con este tipo de medidas o mejor dicho, con esta falta de acción y trabajo, seguiremos siendo la segunda
Región más pobre del país.
Álvaro Gatica Pérez
Vicepresidente Asociación de Agricultores de Ñuble
