La motivación por emprender caracterizó al centenar de jóvenes que asistió al workshop “¿Cómo formar una startup de impacto en la agricultura?”, actividad organizada por Endogroup e INIA Quilamapu, y que estuvo especialmente destinada a estudiantes de carreras vinculadas al agro y a la biotecnología.
El encuentro tuvo por finalidad mostrar, en detalle, el proceso de creación de una startup, para lo cual investigadoras de INIA explicaron el paso a paso que les llevó a generar Endogroup, startup surgida producto de la investigación con Hongos Endófitos que impulsa el INIA Quilamapu, usados como probióticos de plantas para promover su crecimiento y protegerlas del ataque de plagas y enfermedades.
El workshop formó parte de las actividades del proyecto “Desarrollo de una estrategia de escalamiento y prospección comercial internacional del producto Endomix: una alternativa sustentable y ecoamigable para el control de plagas y enfermedades en la agricultura”, que financia el programa Startup-Ciencia de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo, ANID, y que ejecuta Endogroup SpA e INIA.
Definida como una empresa nueva que incuba tecnologías innovadoras, con un modelo de negocios escalable y de crecimientos exponenciales en poco tiempo, la startup cobra popularidad entre los más jóvenes.
Esta fue la modalidad que adoptó el equipo liderado por la investigadora de INIA Quilamapu, Lorena Barra Bucarei, quien con el trabajo de su tesis de doctorado en 2014, empezó a generar las instancias para desarrollar la primera startup de un centro de investigación en agricultura del país, y la primera en Latinoamérica de centros de investigación asociados a los ministerios de agricultura.
La investigadora y CEO de Endogroup comentó que la startup nació “con mucha pertinencia de los problemas a abordar y con una idea innovadora, cuyo resultado dejó entrever que se podía tener un impacto en el mercado”. Agregó que tras la investigación que demostró la utilidad de los hongos endófitos, le siguió el desarrollo de “una tecnología pensada en los agricultores”, dando paso a los probióticos endófitos y a la marca registrada Endomix®.
De la línea Endomix, Lorena Barra explicó que, más que un producto, es una tecnología basada en hongos endófitos, para el control de plagas y enfermedades agrícolas y para promover el crecimiento de las plantas. Remarcó que esta tecnología actúa desde dentro de la planta, donde las condiciones ambientales, que normalmente dañan a los productos biológicos cuando se aplican en el campo, ya no son tan importantes. La planta protege al microorganismo y este protege a la planta de las condiciones ambientales, de las plagas y enfermedades. “Nos hemos enfocado en desarrollar soluciones basadas en la naturaleza y de triple impacto”, dijo.
En lo inmediato, la investigadora destacó que “nuestra idea es democratizar estos productos”, de manera que también esté adaptada a quien quiera producir hortalizas en su hogar, o simplemente alimentar plantas en maceteros de manera natural e inocua. Tras ello, mencionó que apuntan a la internacionalización, debido a que “no hay oferta de endófitos en el mercado agrícola”, lo que significa llevar productos, principalmente destinados a la fruticultura, a otros países.
Javiera Ortiz, directora de proyecto en Endogroup, expresó que formar una startup abre muchas posibilidades. “Lo principal es tener el conocimiento, las ganas y atreverse”, lo que se suma a la satisfacción de “llevar la tecnología desarrollada a todo el país, ser un ente motivador para jóvenes emprendedores y llegar a otros lugares del mundo”. La investigadora, que finaliza sus estudios de doctorado con hongos endófitos, resaltó la importancia de contar con ideas innovadoras que den origen a tecnologías, tras lo cual recalcó que “para innovar no hay límites”
