Para que Ñuble se convirtiera en región, además de los más de veinte años de lucha ciudadana hubo que sortear un proceso legislativo que no estuvo exento de dificultades, de la resistencia de algunos sectores, y también marcado exitosamente por la convergencia de voluntades y apoyos que cruzaron la política partidista, e incluyeron a gremios y organizaciones de la sociedad civil.
Así lo recuerda el ex senador por Ñuble y ex militante del PPD, Felipe Harboe, quien resaltó el compromiso de la expresidenta Michelle Bachelet cuando aún era candidata. “Todo partió en un café con la entonces candidata Michelle Bachelet, previo a su visita a Chillán,
donde conversamos varios temas. Yo era candidato a senador, y le dije que uno de mis puntos principales iba a ser la creación de la región de Ñuble. Le entregué mis argumentos de por qué pensaba que había que crear la región de Ñuble. Ella, al igual que el expresidente Lagos, no era muy partidaria de crear nuevas regiones. Yo le manifesté que uno de los principales problemas que tenía Ñubleera que sus cifras estaban escondidas, estaban opacadas, porque al pertenecer al gran Concepción y a Biobío, pasaban desapercibidas, y la autoridad desde Biobío, dados los problemas de una gran metrópoli, no tenía la capacidad de observar con detalle”, sostiene.
Harboe hacía referencia a las carencias de infraestructura, educacionales, viales y sociales de la entonces provincia de Ñuble.
“Ella se comprometió y me dijo ‘bueno, ok, vamos a avanzar’. Ahora, lo relevante fue que ya siendo Presidenta, se decidiera a mandar el proyecto, puesto que era de iniciativa exclusiva del Presidente de la República, como lo mandata la Constitución. Y para eso, había que preparar el ambiente. Yo le dije que íbamos a trabajar para crear un ambiente favorable al proyecto. Y por eso tuvimos una conversación larga con el entonces senador Víctor Pérez”, rememora.
“A él le dije, mira, ‘aquí tenemos que armar fuerzas entre los dos para que esto salga. Es el Senado el punto de encuentro, porque en la Cámara de Diputados había mucha diferencia entre los diputados de oposición y de gobierno que representaban a Ñuble.
Tú encárgate de los tuyos, yo me encargo de los míos, incluso los detractores, y sacamos adelante el proyecto’. Y así lo hicimos, nos pusimos a trabajar en conjunto, teníamos reuniones quincenales con Víctor para ir viendo el estado de avance, presionábamos al gobierno, en lo que correspondía lo hacía yo; lo otro lo hacía él; él conversaba con la gente de oposición de entonces, yo con el oficialismo; fuimos convenciendo poco a poco, y una vez que le transmití a la Presidenta que teníamos ya acuerdos básicos para dar una buena recepción al proyecto, en ese minuto tomó la decisión de enviar el proyecto, en agosto de 2015”, recuerda.
Tal como lo relata Felipe Harboe, el trabajo legislativo conjunto con el también ex senador, Víctor Pérez, fue fundamental. Así lo expresó el ex parlamentario por Ñuble de la UDI.
“Fue una tarea a la cual hubo que dedicarle muchas horas, pero fue más en el sentido que logramos una gran unidad al interior de Ñuble. A mí, en lo particular, junto con el senador Harboe, trabajamos muy unidos, y eso claramente facilitó las posibilidades de poder realizar una tarea efectiva y eficiente, y eso se logró. Sin esa unidad, yo creo que habría sido verdaderamente difícil establecer un parámetro de eficiencia en los temas legislativos”, comenta.
Llamado a la unidad
El gobernador regional de Ñuble, Óscar Crisóstomo, resaltó la labor realizada por los legisladores de aquel entonces.
“Creo que tuvimos también aquí el compromiso genuino de dos senadores y de todos los parlamentarios en general de nuestra región. Tanto Víctor Pérez como
Felipe Harboe tuvieron ahí una muñeca, una vitrina, un interés genuino en poder constituir y ser parte de los defensores de este proceso de creación e instalación de la región de Ñuble. Quiero valorar que este proceso fue tremendamente transversal, y espero y siento que sea el mismo espíritu el que siga estando presente a la hora de tomar decisiones, porque en esto somos todos responsables del proceso que se viene por delante, del proceso que actualmente estamos viviendo”, remarca.
La actual autoridad regional también destacó la transversalidad demostrada durante los gobiernos de Michelle Bachelet y Sebastián Piñera. “Sin el apoyo de la Presidenta, este hito no hubiera sido de las características que hoy estamos viviendo, y fue también muy expedito, porque el compromiso que existía era tremendamente genuino. Creo que Ñuble le debe mucho a la expresidenta Bachelet, le debe la oportunidad de haber nacido como región. Y en ese marco, también indudablemente que al expresidente Piñera le tocó la instalación del proceso, instalar la región de Ñuble. Fueron dos años de mucho trabajo, en que se crean también algunos planes como el Plan Ñuble, hubo un diseño bajo su mandato, que permitió dar continuidad a la decisión que habían tomado el gobierno de la expresidenta y el congreso de crear la región de Ñuble, por lo tanto, esa cadena institucional se cumple y también se valora, porque permite la instalación definitiva de nuestra región”, plantea.
Gustavo Sanhueza, quien en esa época era consejero regional, luego fue diputado y actualmente es senador por Ñuble, también resaltó el espíritu de unidad que llevó a la creación de la región, e hizo un llamado a reeditar la labor del comité en una nueva organización de la sociedad civil.
“Fue un largo proceso que demostró que cuando se trabaja por un gran sueño, las diferencias pasan a un segundo plano. Ñuble se unió, pese a la tenaz oposición de Biobío, región que nos tuvo sumida en décadas de un centralismo y postergación. Creo que éste fue un triunfo de todos los ñublensinos que recordamos con emoción, sobre todo en este quinto aniversario. La gran lección que nos queda para el futuro es cómo somos capaces de reeditar el trabajo del Comité Ñuble Región en un órgano de la sociedad civil que fije nuestras prioridades de desarrollo, y que no sea el gobierno de turno quien establezca estas prioridades. En la medida que los ñublensinos trabajemos nuevamente unidos, estableciendo nuestras prioridades, vamos a poder lograr el desarrollo de nuestra región, y en eso tenemos que mantener viva nuestra unidad regional y nuestra identidad que nos caracteriza como ñublensinas y ñublensinos”.
El gobernador, Óscar Crisóstomo, también hizo un llamado a reeditar la unidad y transversalidad demostradas durante el proceso de creación de la región para alcanzar grandes acuerdos que beneficien al territorio.
“En cuanto a las lecciones de futuro que nos deja el proceso de creación de la región de Ñuble, creo que primero hay que valorar el primer proceso que tiene que ver con la participación ciudadana, la organización social y la unión de los actores clave, políticos, parlamentarios, alcaldes, concejales, dirigentes sociales, un sinnúmero de personas que empujaron la creación. El ánimo de creación y de futuro es algo que tiene que estar siempre en la primera lista cuando uno analiza la creación de Ñuble”, enfatiza.
Entre las cosas pendientes, Crisóstomo estima que sin lugar a dudas, “aquí faltan muchas cosas, faltó una buena planificación probablemente del Estado, de entender cuál era la magnitud de una instalación como debió haberse dado en una región como la nuestra, una región tremendamente rural, y en eso seguimos al debe, y creo que aquí el Estado debe ir resolviendo las grandes desigualdades con las cuales nace la región de Ñuble, en términos de conectividad, caminos, agua, salud, educación. Sí hay que valorar que hemos avanzado, porque en estos cinco años somos muy diferentes a lo que éramos como provincia, por lo tanto, si bien hay brechas que debieron haberse planificado o realizado de otra manera, con otra envergadura, con el conocimiento acabado de lo que implicaba la creación de la región de Ñuble, yo me quedo con los aspectos positivos que hoy nos han permitido tener la autonomía y tener muchos más recursos para poder llegar a paliar esas deficiencias que tenemos como región, y que particularmente nos ha permitido llevar progreso hasta donde antes no existía”, recalca.
“No nos tenían fe”
Pero antes del proceso legislativo -y durante-, fue la sociedad civil ñublensina la que impulsó la creación del territorio.
En innumerables ocasiones acompañó a los parlamentarios durante las largas jornadas en el congreso. Quien fuera el último presidente del Comité Ñuble Región, Hérex Fuentes, así lo constata.
“Nos costó mucho trabajar, lograr el objetivo final, que era crear la región de Ñuble, contra viento y marea. Nos tocó ir muchas veces a Santiago, a la Moneda, a la Subsecretaría y también a Valparaíso para aprobar el proyecto de ley. Y hasta última hora había, como se dice en buen chileno, así entre comillas, ‘pájaros de mal agüero’ que decían que la región de Ñuble no se iba a crear, que iba a ser un desastre, no sé qué. Obviamente que los de Concepción no nos creían, los penquistas no tenían fe en el proyecto, nos denostaron muchas veces que íbamos a ser la región más pobre, pero igual esto está saliendo adelante, así que lo agradecemos de todo corazón, estamos contentos por ello, y por supuesto que nos enorgullece el haber trabajado por la creación de la región de Ñuble”, resalta.
Hérex Fuentes destacó los beneficios de habernos convertido en región, y también las deudas pendientes, como el mar para Ñuble.
“La verdad es que estamos tremendamente satisfechos por el logro de haber creado la región, haber convencido a tantas autoridades que no nos creían, entre ellas los alcaldes, y también las autoridades locales, tanto de Ñuble como del Biobío de esa época. Uno de los objetivos que se ha cumplido es el crecimiento del presupuesto para la región, presupuesto económico, que va muy avanzado. Se han logrado varios hechos que sí esperábamos, pero estamos pendientes y, por supuesto, hago un llamado a las autoridades, como el gobernador y también al delegado Presidencial y a la seremía que corresponda, de la exclusividad marítima, que es lo que habíamos propuesto en su tiempo. Necesitamos una exclusividad marítima, y eso es lo que nos han estado pidiendo los pescadores de Cobquecura, Trehuaco y Coelemu”, recalca.
Felipe Herboe también resaltó las ventajas de habernos convertido en región y los desafíos pendientes. “Desde el punto de vista de los impactos, yo diría que lo primero es que la autoridad está más cerca del territorio y eso es muy beneficioso, porque puede conocer con mayor cercanía los problemas que van aquejando a los diferentes rincones de la región. Un segundo punto que es relevante es que tenemos hoy día fondos regionales que son muy superiores a los que recibíamos siendo provincia de Ñuble, cuando éramos parte de la región del Biobío, y eso implica mayor responsabilidad, pero también mayor posibilidad de desarrollo. Y tercero, yo diría que en lo que estamos al debe, creo yo, es en la instalación. Creo que una parte importante de los funcionarios que debían llegar para que los servicios públicos tengan las competencias y resuelvan los problemas del territorio, no ha llegado y ya no llegó, y eso es un problema, porque evidentemente genera un déficit en la gestión. Creo que las delegaciones provinciales debieron tener no sólo más atribuciones, sino particularmente más capacidad de resolver problemas. Y no se observa que los servicios públicos provinciales tengan capacidad de decisión, lo que vuelve a instalar la lógica del centralismo intrarregional”, advierte.
Víctor Pérez, en tanto, recordó que al segundo gobierno de Sebastián Piñera le tocó instalar el territorio.
“A nosotros nos tocaron los primeros años de instalar la región, y eso fue una tarea compleja, una tarea difícil, pero que se hizo, a mi juicio, exitosamente. Creo que los intendentes Arrau y Jardúa hicieron una gran labor, se instaló la región con todas sus seremías, con todos sus servicios, y además, conjuntamente con eso, se establecieron metas realizables que se fueron concretando,
como por ejemplo, el hospital, los cien kilómetros de pavimentación rural, etc.”, destaca.
