Señor Director:
Por estos días, el proyecto de reforma previsional del gobierno pareciera tener alguna chance. Pero, a no ilusionarse. Ya antes pasó. Más allá que pudiera ser aprobado estrechamente en la Cámara, queda el escollo que representa el Senado, donde la bancada AFP es transversal y fuerte. Ahora mismo se deben estar moviendo intensamente los contactos para ir tejiendo la red en que quede atrapado el sueño de una mejora a las pensiones autofinanciadas.
Se intentará reducir la reforma a una mejora en la PGU. Lo que sea, con tal de no afectar a la industria previsional. ¿Modificar tablas de mortalidad? Ni hablar: implica reducir más aceleradamente el stock financiero que genera lucro a las AFP.
Más de alguien recordará entonces por qué razones el primer proyecto de nueva constitución proponía eliminar el Senado.
Luis Alberto Machuca Mardones
