Sin muchos cambios fueron los últimos balances en materia de incendios realizados ayer martes por parte de las autoridades, en la Región de Ñuble.
El número de focos activos prácticamente se ha mantenido, por lo que sigue en los 16 puntos en desarrollo en los que se sigue combatiendo, y en las mismas 14 comunas declaradas con siniestros el lunes. La Conaf confirmó que se trata de incendios que se encuentran bajo control.
También se repite el que la máxima concentración de recursos se mantienen en las comunas de Quillón, provincia del Diguillín; y Coelemu, en la Provincia del Itata.
El director regional de la Conaf, Juan Salvador Ramírez comentó que, de todas formas, la cantidad de hectáreas consumidas sí ha visto un leve incremento respecto al lunes, jornada que cerró con 65 mil hectáreas afectadas.
Ayer, ya se superaban las 67 mil en lo que va de la temporada estival 2022-2023.
“Estamos en la etapa próxima al control, con unidades terrestres de brigadistas que van apagando los focos, junto con recurso aéreo, particularmente en las comunas de Quillón, Ninhue y Coelemu”, especificó el director.
Respecto al sorpresivo foco que se registró en el sector del camino principal a Rucapequén, en la comuna de Chillán Viejo, bomberos ratificó que también se mantuvo bajo control y no se registraron afectaciones a viviendas.
Sin embargo, las críticas por parte de los encargados de controlar estas emergencias volvieron a apuntar a la falta de criterio de las personas del lugar, ya que hubo quienes comenzaron a utilizar drones, sin mayor fin que el de tener imágenes aéreas del fuego, los que incomodaron la labor de las brigadas aéreas que acudieron al sector.
“Fue la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) la que señaló la complejidad que estaban teniendo las aeronaves a causa de estos aparatos”, confirmó Ramírez.
Edil productores afectados
Respecto al balance diario que realiza el Gobierno Regional de Ñuble (GORE), su titular, Óscar Crisóstomo, destacó que ya son sobre mil los productores damnificados.
“Ellos han perdido toda su producción, ya sea en frutales, en vinos, en viñedos, lo que es necesario consignar porque estimo muy importante tener esa mirada, y es per eso que le pedimos a la ministra Carolina Tohá que se impulse de carácter urgente un plan de empleo agrícola”, anunció el gobernador.
128 casas destruidas en Itata
En cuanto a la Provincia del Itata, que sigue con todas sus comunas bajo el régimen de toque de queda, continúa siendo la más dañada de la región, en lo que concierne a infraestructura, plantaciones, animales muertos y personas damnificadas.
El delegado provincial, Luis Cisternas, precisó que “tenemos 175 viviendas afectadas, de las que 128 están totalmente destruidas; en cuanto a los sistemas de agua potable rural, tenemos seis sistemas afectados en las comunas de Ránquil, Portezuelo y Quirihue”.
Cisterna detalló que las personas afectadas por los siniestros son 370 hasta el momento, de las que 25 están hospedándose en albergues.
En cuanto a infraestructura vial, la provincia declara tres puentes dañados, todos ellos en la comuna de Ninhue (Pichimávida, Llohuén y el de Las Higueras).
“En resumen, podemos decir que en la Provincia del Itata tenemos siete focos activos, en seis comunas, con 52 mil hectáreas consumidas, lo que equivale a decir que casi el 78% de la superficie quemada ha sido en la Provincia del Itata”, sostuvo la autoridad provincial.
En esta semana esperan contactar a 62 de las familias de las 128 destrozadas para comunicarles que ya se compraron viviendas de emergencia. De ellas 36 vienen directo a la Provincia del Itata “y estas van a Coelemu, Ninhue y a Quirihue”, confirmó.
