Basta caminar por algunas cuadras en Quirihue, para percibir el nivel de identificación que tiene su comunidad con el Museo Antropológico de Itata, con sede en esta comuna. Acumula más de tres años de funcionamiento, con una fuerte llegada al público visitante, así como también entre residentes, que acuden a este sitio en grupos acotados.
Recientemente, el Servicio Nacional de Patrimonio Cultural le asignó un fondo de $14.301.000 para el mejoramiento de la conservación de los objetos que le pertenecen, también los que lleguen en un futuro, además de los que se exhiban en modo de préstamo.
Ha sido un trabajo extenso, pero que actualmente realza el nombre de la comuna a nivel nacional, ya que se codea con otros sitios de similar envergadura como contribución a la cultura.
Desde el municipio, la administradora Juana Cisterna adelantó que fijaron para principios de septiembre la firma del convenio para los trabajos en el lugar. Esto permite calcular para octubre o quizás noviembre, el inicio de las obras.
“Es un orgullo para la comuna y para su alcalde, concretar este primer museo antropológico de la región. Es un atractivo en la comuna, hemos tenido visitas de toda la región. Esto se dio gracias a la participación de distintos personajes importantes de la cultura, por ejemplo, Fabián Irribarra. Ahora dejó el cargo para irse a Chillán Viejo, esto es una gran pérdida para nosotros, pero al mismo tiempo, nos alegramos por él”, relató.
Justamente, antes de dejar sus labores como encargado de Patrimonio y Turismo, Irribarra presentó la revista digital Coiquén, que explica en profundidad el proceso de habilitación de este espacio. También mantiene activo el sitio web del museo antropológico: www.itata-ma.cl.
Desde sus comienzos
Han pasado ya más de cuarenta años desde que se gestó la idea de conformar este museo en Quirihue.
Actualmente, cuenta con la coordinación de Juan Sepúlveda, quien destaca el proceso inicial, al que se han sumado hallazgos de restos humanos, que caracterizan la identidad de la zona. Nada habría sido posible sin los primeros impulsos de líderes sociales.
“El entonces diputado, Tomás Irribarra De la Torre, ayudó a que se concretara como una propuesta que la comunidad requería. En Quirihue, la familia Irribarra es una familia con trayectoria, que marca lo que fue San Carlos e Itata. El legado tiene que ver con la gestión”, recordó.
Este recinto cuenta con una donación inicial de la antropóloga quirihuana Zulema Seguel, quien además, ofreció su colaboración al municipio para la instalación de este icónico espacio en pleno centro de la comuna, frente a la Plaza de Armas.
Ahora se centran en la próxima sala de colecciones como un depósito de material bioarqueológico, que satisfaga la curiosidad de investigadores del patrimonio, tanto de Ñuble como de otras regiones.
Sello quirihuano
Desde el 22 de enero de 2019 existe este espacio en Quirihue, que desde el primer día ha fortalecido el nivel de pertenencia de la comunidad. Una invitada clave en la inauguración fue la antropóloga Zulema Seguel, quien hasta la actualidad mantiene un lazo sólido con el equipo municipal de gestión.
Ella es docente, ocupa un lugar crucial en la metodología de esta rama a nivel nacional. También es reconocida en los estudios arqueológicos y antropológicos del sur del país.
Entre los principales registros que contribuyen al tiraje de este museo, destacan las revistas especializadas que ha preparado su equipo completo en Quirihue. En la editorial de Memorias firma la antropóloga Seguel, con un claro reconocimiento de este trabajo de tantos años.
“Cada objeto, huella o vestigio que nos remita al pasado o nos sitúe en el presente representa la creatividad del cerebro humano, abarcando todos los aspectos de la cultura, ya sea material, espiritual, cosmovisión del mundo, estética, arte, ciencia, postulados filosóficos, entre otros”, relató allí.
Con este museo, Quirihue se desmarca de las tendencias centralistas que privilegian el protagonismo de la capital de la región. En este caso, la iniciativa del Museo Antropológico de Itata es un ejemplo para los demás recintos que pertenecen a la Red de Museos.
Texto: Catalina Garcés Rondanelli