“Salí de mi zona de confort”, sostiene Jacqueline van Rysselbergue Herrera cuando se le pregunta por qué no repostuló al Senado por su zona, Biobío.
Niega tajantemente que haya sido para permitir que su hermano, Enrique, compitiera por allá.
“Ésa es una aseveración muy malintencionada, porque es justamente al revés. Yo no habría podido venirme para acá si no hubiera habido un reemplazo con posibilidades reales allá. Enrique fue Premio Universidad, es una persona exitosa en su área y ha sido primera mayoría siempre como diputado, por lo tanto, quienes dicen lo contrario, no nos conocen y son malintencionados”, sostiene enérgica la expresidenta de la UDI.
– ¿Es la elección parlamentaria, a su juicio, la más importante del próximo 21 de noviembre?
– Efectivamente, el próximo parlamento y en especial el Senado, tendrá un rol fundamental. Siempre las presidenciales se visualizan mucho más que las parlamentarias, y ésta mucho más por los conflictos que ha habido. La elección parlamentaria es muy importante, pues sus elegidos tendrán que tomar decisiones en torno a la Convención Constitucional, son quienes tendrán que tener claridad sobre ciertos temas, si la Convención quiere ser un poder originario, es algo que no está dentro del acuerdo que firmamos y los acuerdos son para cumplirlos. Por eso es importante que quienes salgan elegidos sean personas de convicciones, porque de lo contrario, nos vamos a ir por el despeñadero.
– ¿Cómo ha visto a Ñuble en esta campaña? ¿Ha notado algún cambio respecto de cuando éramos provincia del Biobío?
– No, son solo tres años y yo representaba al distrito 42, que eran trece comunas de la actual región. Pero creo que le ha hecho bien a Ñuble ser región, y me alegro de haber votado a favor, para quienes dicen que voté en contra.
– Pero su apoyo fue casi al final del proceso…
– No, voté a favor en todos los trámites. Quienes dicen lo contrario, están mintinedo.
– Pero no hubo una participación comprometida durante la tramitación, como la de los senadores Pérez y Harboe…
– Hice todo el trabajo que era necesario. Yo no formaba parte de la comisión de Constitución, como Felipe o Víctor, que son abogados.
– Pero en un principio ud. no era muy de la idea de dividir la Región del Biobío…
– Es que eso no es efectivo. No hay ninguna declaración mía en ese sentido, y quienes instalan eso son personas que mienten descaradamente. Lo que yo sí dije fue que había que hacer un estudio, el estudio se hizo y salió positivo.
– ¿Y le ha traído eso problemas durante esta campaña? ¿Que la gente la asocie con la idea de que no quería que Ñuble fuese región?
– Yo creo que no, pero es odioso que traten de sacar ventajas políticas sobre la base de mentiras, porque obras son amores y están las votaciones. Quienes votaron en contra fueron dos senadores de Santiago.
Dos UDI/un cupo
– ¿Cómo ha sido la disputa interna con el otro candidato de la UDI, Gustavo Sanhueza? Porque lo lógico habría sido que la UDI llevara un solo(a) candidato(a)…
– Eso se acordó en la comisión política, hacer una encuesta y yo gané esa encuesta, por lo tanto, me correspondía el cupo. Incluso, yo pedí primarias, junto con las presidenciales, pero fue imposible. A mí no me molesta competir, pero efectivamente, a última hora bajaron a Mario Ríos y subieron a Gustavo Sanhueza, lo que desde el punto de vista electoral no era lo más conveniente, pues de alguna manera, son dos candidatos de un mismo partido y Mario Ríos apuntaba a un electorado distinto.
– ¿Ha sido una campaña dura? Porque justamente el eslogan de Gustavo Sanhueza es “Ñublensino 100%”, en una clara alusión a que usted no es de Ñuble…
– Uno no elige dónde nacer, pero sí elige dónde servir, y yo elegí servir en Ñuble, decisión de la cual me siento orgullosa y que está siendo respaldada por un montón de gente que fue a pedirme a mi casa que me reeligiera por acá. Era salirme de mi zona de confort, pero si no hubiera tomado esa decisión, seguramente se habría perdido la senaturía para la UDI, porque habría competido Frank Sauerbaum, y él siempre ha sacado más votos que Gustavo Sanhueza, y no hay razón para pensar que habría pasado algo distinto.
– Al develarse los pagos de pesqueras a la campaña a diputado de Sebastián Sichel en 2009, cuando militaba en la DC, resurgieron los cuestionamientos hacia los correos que exisitieron entre ud. y un ejecutivo de Asipes. ¿Cómo enfrenta nuevamente esta polémica?
– La verdad, nunca me ha traído problemas esto porque yo no era parlamentaria cuando se aprobó la ley de Pesca. Ésa es otra de las tantas mentiras que se han dicho.
– Pero sí hubo correos con el presidente de Asipes…
– Es un enredo que han armado. El hecho concreto es que yo no era parlamentaria cuando se legisló la ley de Pesca.
– ¿Qué desafíos tiene, a su juicio, la Región de Ñuble?
– Acá la agricultura no es solo una actividad económica, sino una forma de vida, la gente vive en el campo, por lo tanto, se debe evitar que se transforme en una región forestal, como ha sucedido con la provincia de Biobío. Para ello, se necesita agua, se debe avanzar en los embalses, pero también en electricidad, y me llama mucho la atención que eso no se haya relevado. Hoy en Ñuble no hay electricidad, si el hospital que se construye comenzara a funcionar hoy, debería hacerlo con grupos electrógenos. Las autoridades no han sido capaces de levantar la voz, el Presidente cuando vino hace unos meses, no sabía que estaba ocurriendo esto, porque no se lo habían comunicado. Lo mismo con el déficit de vivienda, hay comités que se han demorado 25 años, y Ñuble también sufre de falta de conectividad, le hace mucha falta un aeropuerto para poder atraer inversiones.
