Señor Director:
Largamente se ha hablado estas semanas del rol de la sociedad civil y/o el actor privado en la implementación de las
políticas territoriales mandatadas por el Estado. Respecto a lo mismo, en líneas generales suena razonable que, frente a
los alarmantes números mostrados por el MINVU, que cifra en aproximadamente 650.000 viviendas de déficit, es decir,
un incremento del déficit del 66% en siete años, se busque unir fuerzas entre todos los actores de nuestra sociedad, tanto
actores sociales, públicos y privados, para dar cumplimiento a la demanda de más y mejores viviendas.
Sin embargo, es importante recordar otros indicadores que confluyen al mismo problema, tales como la caída de auto-
rización de superficie construible en un 37%, aumentos en los tiempos de tramitación de los permisos de edificación hasta
en 18 meses y congelamientos demasiado recurrentes de planos reguladores comunales, lo cual no hace más que dificultar
el camino para que diversos actores, desde su área, busquen ser un aporte a la calidad de vida de los chilenos.
Es por esto que se requiere abordar esta problemática con urgencia, ya que la demora en la ejecución de estos proyectos no
solo genera un retraso en la entrega de miles de viviendas y un déficit en la calidad de vida de las ciudades y las personas, sino
que también pone en riesgo la viabilidad de las empresas que participan de todo este proceso, sin dejar de mencionar que
es un apalancador de la inclusión social, se fomenta el desarrollo económico, la empleabilidad y la inversión en el país.
Patricio Fernández
Gerente de Desarrollo de Greystar Chile
