Señor Director:
El supuesto que, en estos tiempos de avance tecnológico, es significativa la buena relación entre el Estado, las empresas y la ciudadanía. Pero, cuando ésta última cuando se ve afectada, tiene el derecho a efectuar el reclamo pertinente.
Este es el caso de una situación que nos tiene muy preocupados y afectados psicológicamente desde hace varios meses a 15 familias de la última cuadra (11) de la calle Claudio Arrau y entorno, en las cuales existe un alto porcentaje de adultos mayores con enfermedades propias de la edad. Se trata de la incertidumbre provocada por el proyecto de la empresa SBA Torres ST. de instalar una torre para repetidoras de telecomunicaciones en el patio de una casa de calle Claudio Arrau 1191. Nos oponemos a esa construcción porque, estamos conscientes por experiencias en otras latitudes de que, aquella traería consecuencias nefastas para nuestra salud física y mental, aunque se esgrima el argumento de que no está comprobado aquello. Pues bien no estamos dispuestos a esperar su comprobación.
Sabemos que, el municipio de Chillán no ha autorizado dicha construcción, sin embargo en el mes de mayo, la empresa ordenó hacer trabajos de despeje y excavación en el sitio de Claudio Arrau 1191, sin disponer de dicha autorización.
Además, sabemos que la empresa supuestamente envió cartas certificadas vía correo a los vecinos, lo cual, no es efectivo porque, sólo un vecino la recibió. El resto, nada, incluyendo a la presidenta de la Junta de Vecinos de la cual dependemos y aún más, de acuerdo a protocolo de Correos, no se obtuvo firma comprobando su recepción.
Marcial Pedrero Leal
