Las obras de asfaltado para los caminos de la Colonia Bernardo O’Higgins y del acceso a la Villa San Miguel de Arcángel, ambas proyectadas para ejecutarse en 150 días y ser entregadas el 10 de julio, debieron modificar su fecha de entrega por un plazo aproximado de 30 días hábiles, conforme lo explicaran desde la Dirección de Obras del Municipio de Chillán, entidad a cargo de ambos proyectos.
Lo anterior, conforme explicaran desde el consistorio a La Discusión, se fundamenta en que tras la última inspección en terreno realizada por personal técnico del Serviu Ñuble, se solicitó añadir trabajos de demarcación y delimitaciones, lo que no estaba contemplado en el proyecto original.
Si bien las labores de demarcación se pueden resolver -teóricamente-en no más de dos o tres semanas, actualmente se está a la espera de la confirmación de los recursos adicionales necesarios para dar cumplimiento a estos requerimientos del Serviu, los que ascienden aproximadamente a $20 millones.
De esta manera, de no mediar nuevas observaciones o requerimientos adicionales, los trabajos de ambos caminos entrarían en la etapa administrativa de la recepción de obras dentro de los últimos días de agosto y primeros días de septiembre.
Para los vecinos de ambos sectores residenciales, sin embargo, esta demora no representa necesariamente una mala noticia.
“Cuando ya hemos esperado 14 ó 15 años y sin que nunca nadie nos escuchara, que ahora estos trabajos se demoren uno o dos meses más, la verdad es que no podría ser motivo de quejas en caso alguno, por el contrario, estamos muy agradecidos”, explica Cristian Torres, presidente de la Junta de Vecinos de la villa San Miguel de Arcángel.
Actualmente, se advierte la carpeta de asfalto a lo largo de esos casi 900 metros de camino que los conecta con su única salida a la ciudad, es decir el camino antiguo a Coihueco, saliendo por la calle Andrés Bello esquina Vicente Méndez.
“Yo trabajé por años en la empresa que está haciendo este trabajo y por años he trabajado haciendo caminos, y conozco el proceso, por lo que entiendo que por el tema de las lluvias no han podido terminar, ya que si el terreno está húmedo y se aplica el líquido caliente que requiere el proceso, la carpeta se parte formando grietas y hoyos”, añade el dirigente.
En el caso de la Colonia Bernardo O’Higgins, el presidente de la junta de vecinos, Eduardo Riquelme, asiente con su par de la villa San Miguel, respecto a que “lo que tenemos ahora es mucho mejor a lo que había antes” y en que “lo que se prometió en el proyecto original que nos presentó la municipalidad, se hizo bien”.
Sin embargo, advierte que “para ser honestos, no estamos conformes todavía, no por la calidad del trabajo, sino porque es claro que este camino requiere de luminarias, veredas y de una ciclovía, ya que anda mucho ciclista y en las noches es difícil verlos. Lo mismo pasa con los peatones”.
Respecto a las grietas y baches que se advierten en ambas pistas, desde la municipalidad explican que se restaurarán de manera definitiva una vez que las condiciones climáticas lo permitan.
1.760 metros de asfaltado
Ambas obras están a cargo de la empresa Contratista Carolina Villegas Silva.
En el caso del camino antiguo a Coihueco, contempla el asfaltado de doble tratamiento de aproximadamente 790 metros, entre el cruce Andrés Bello y el puente sobre el Estero Las Toscas.
Además, la municipalidad ya concluyó los trabajos de reforzamiento del puente peatonal metálico que conecta al sector con la villa Barcelona, puntualmente hacia su calle de acceso, Río Segre.
Para el camino Colonia Bernardo O’Higgins, considera el asfaltado de doble tratamiento y de aproximadamente 860 metros entre Villa Santa Maríay el límite urbano, donde empieza el pavimento ejecutado por Dirección de Vialidad.
