La mesa de la Convención Constitucional fue recibida por el presidente del Senado, Álvaro Elizalde, con miras a iniciar un proceso de diálogo y de análisis de una eventual transición institucional, que respete el actual mandato de los legisladores, en el marco de la nueva Constitución y el plebiscito de salida.
Por ejemplo, una de las propuestas que discutirá la comisión de Normas Transitorias de la Convención, es que partir del 11 de marzo de 2026 comience a regir el nuevo Poder Legislativo, el cual contempla la creación de una Cámara de las Regiones, en reemplazo de la actual Cámara Alta.
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“Es muy importante este proceso de diálogo, porque la Convención Constitucional ha entrado a una fase de definición de las llamadas ‘normas transitorias’, que van a permitir transitar entre la actual institucionalidad y la nueva, en la medida que en el plebiscito ratificatorio triunfe el Apruebo”, sostuvo el presidente del Senado, Álvaro Elizalde, quien se reunió con la presidenta de la Convención, María Elisa Quinteros, y el vicepresidente, Gaspar Domínguez.
El legislador explicó que “la mesa de la Convención está teniendo reuniones con los llamados ‘poderes constituidos’ y, por eso creemos que este proceso de diálogo es muy importante para escuchar distintos puntos de vista, distintas sugerencias respecto de cómo garantizar mejores normas transitorias”.
Precisó que “en el caso del Congreso Nacional, está íntegramente elegido por un sistema de carácter proporcional, lo que le da una mayor legitimidad respecto de congresos anteriores, y en este contexto se han propuesto, por parte de la Convención, cambios sustantivos. Por tanto, las normas transitorias deben reconocer esta realidad. Un número significativo de parlamentarios fue elegido con posterioridad de la Convención Constitucional y, por lo tanto, tienen mandato popular, mandato ciudadano para ser los representantes del pueblo en el proceso legislativo. Por eso creemos que esto tiene que considerarse a la hora de definir las normas transitorias”, señaló el senador Elizalde.
Gaspar Domínguez, vicepresidente de la Convención, destacó que el objetivo de este ciclo de reuniones “es enriquecer el debate que se dará para las transitorias, con las opiniones de distintas instituciones sobre los plazos adecuados para llevar adelante la propuesta constitucional en forma gradual”.
A nivel local, el senador de la UDI, Gustavo Sanhueza, sostuvo que “es difícil hacer política ficción, pero se deben resolver las disyuntivas que se abrirán la noche del 4 de septiembre. Por un lado, si el Apruebo gana con un gran porcentaje, habrá una decisión ciudadana que aprueba esta nueva Constitución. Si el Rechazo gana con un gran porcentaje, también hay una manifestación ciudadana respecto de la propuesta de nueva Constitución. Sin embargo, el camino o tercera vía que hay que establecer es ante el escenario que el Apruebo o el Rechazo ganen por un estrecho porcentaje. Eso querrá decir que hay un país dividido en torno a esta propuesta de nueva Constitución, que no es lo ocurrido en el plebiscito de entrada. Esto es fundamental para establecer cuáles serán los artículos transitorios, aquí hay que ponerse en los distintos escenarios, y para eso hay que tener una visión amplia del sentir de los chilenos y chilenas”, aseveró.
Reunión con mesa de la Cámara
La mesa de la Convención se reunió también con los representantes de la Cámara de Diputados.
Raúl Soto, presidente de la instancia, afirmó que desde la Corporación deben prepararse para “cualquiera sea el resultado” del plebiscito de salida, ofreciendo “una salida institucional” a la crisis que inició en octubre de 2019.
“El rol institucional que asumimos como Cámara de Diputados y Diputadas, es un rol de respeto al proceso, a la autonomía no solamente al proceso de redacción y constitución de la propuesta de nueva Constitución, sino que también de todos aquellos elementos que establece nuestro proceso electoral, y de la voluntad electoral que se va a expresar en septiembre”, indicó.
El parlamentario apuntó a que “nuestro rol es garantizar que, cualquiera sea el resultado, nuestro país tenga una salida institucional que permita viabilizar una salida a una crisis social, que es muy profunda y que tuvimos hace dos años”, dijo.
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