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“Hoy es el tiempo de los liderazgos éticos y dialogantes”

Podría pensarse que la contienda sin tregua en la UDI por alcanzar el cupo senatorial de Ñuble entre Jacqueline van Rysselberghe y Gustavo Sanhueza, acarrearía para este último un peso mayor en esta campaña.

Sin embargo, el diputado chillanejo dice que no ha sido así. Por el contrario, no ha notado diferencias en relación a sus últimas incursiones, como concejal de Chillán, consejero regional y diputado.

Ni siquiera lo han descolocado las últimas declaraciones del exsenador, Víctor Pérez, quien le dio su apoyo a Van Rysselberghe, y dejó entrever que Sanhueza no tendría las “características” que se necesitan para asumir como senador por Ñuble en el actual contexto del país.

– ¿Cómo recibió estas palabras del exsenador Pérez?

– Yo siempre me voy a expresar de buena manera del exsenador Víctor Pérez, nosotros trabajamos mucho tiempo juntos, específicamente para convertir a Ñuble en región, tiempo en el que aprendí que había que sumar visiones diferentes. Esa unidad, pese a las diferencias políticas, fue lo que le dio el impulso final a la creación de la Región. Estoy muy agradecido de ese proceso que finalmente permitió que Ñuble se independizara de la Región del Biobío, pese a que también me tocó ver la oposición tenaz por parte de Biobío para que eso no ocurriera.

– Pero el exsenador no solo le dio su respaldo a JVR, también se refirió a que ud. no cumpliría con el perfil para asumir como senador…

– Vivimos tiempos diferentes, en los cuales se requieren liderazgos que sean más empáticos, constructivos y dialogantes. Yo he demostrado transversalidad para trabajar con diferentes actores políticos dentro de la región, sobre todo ahora que asumieron nuevos alcaldes que son de otros sectores políticos. Tengo esa capacidad para dialogar y para avanzar como región, proceso en el que nos necesitamos todos. Hoy es el tiempo de los liderazgos éticos y dialogantes.

– ¿Es un liderazgo completamente distinto al que propone la senadora Van Rysselberghe?

– Soy un convencido que para avanzar como región y como país necesitamos diálogo. La polarización que se ha producido en el último tiempo no es el camino, en la medida que seamos capaces de construir acuerdos sobre la base de las necesidades que tiene hoy día la ciudadanía, avanzaremos. Noto que hay una desconexión muy grande entre la política antigua y la gente, se perdió la empatía. Y esa conexión se logra con el diálogo, no con la polarización. Por ejemplo, hay una discusión sobre la reforma de pensiones, que a mi juicio, ya está obsoleta, porque está basada en la relación trabajador-empleador, y post pandemia, el mundo va a tender al emprendimiento, al teletrabajo y al trabajo individual prestando servicios. La matriz va a cambiar, por lo tanto, estamos llegando tarde incluso a lo que estamos legislando.

Grandes reformas

– En caso que José Antonio Kast pase a segunda vuelta, ¿Uds. van a apoyarlo ciegamente, o van a pedir ciertas garantías para que su programa “se suavice”?

– De todas maneras. Soy uno de los que ha manifestado que existan conversaciones previas, que no esperemos al 21 en la noche y perdamos una semana tratando de ponernos de acuerdo. Hay muchos puntos de convergencia, y en ellos se podría tener un preacuerdo determinado. Siento que entre los cuatro candidatos competitivos hay más una preocupación por encontrar los errores del otro, y echo de menos un discurso con propuestas.

– ¿Y cuál es la importancia que tendrá el próximo parlamento, teniendo en cuenta que en paralelo, la Convención entregará una propuesta de nueva Constitución?

– La implementación de lo que salga de la Convención se materializará por medio de las leyes que dicte el congreso, y en ese sentido, la responsabilidad que vamos a tener será mayúscula, porque debemos responder primero a los requerimientos de la ciudadanía. Debemos ser lo suficientemente responsables para que las leyes que emanen sean realistas, y no terminar como Venezuela.

– Entre las grandes reformas, además de las Pensiones ¿Cuales debieran abordarse de inmediato a partir del próximo período?

 Creo que hay cuatro grandes áreas. Lo primero, ponerle atajo a la delincuencia y narcotráfico, hoy estamos siendo absolutamente sobrepasados, y para eso hay que hacer las inversiones necesarias, no tenemos capacidad de rehabilitación, y hay que enfrentar el problema en todos sus ámbitos, no solo reprimiendo. A lo mejor podemos tener un modelo que pueda emanar de Ñuble, se puede conversar con el gobernador regional y el alcalde de Chillán. Por otro lado, tenemos la Salud, es vergonzoso hoy ver a nuestros adultos mayores ir una y otra vez a los cesfam. En el mundo privado, las horas se toman de manera electrónica. Tenemos que avanzar hacia eso y utilizar la tecnología, pues mejora la calidad de vida. Tenemos una gran reforma de Fonasa detenida por un tema ideológico, que hay que destrabar. En Educación, debemos avanzar hacia que el kinder sea obligatorio, y como ñublensinos, debemos trabajar por una agricultura sustentable.

– ¿Cómo se concilia la necesidad de agua con el medioambiente? El embalse Punilla es resistido por las comunidades cordilleranas por sus efectos negativos en esa zona…

– He planteado desarrollar una política de microembalses tipo Tranque de Coihueco, y el desarrollo de la tecnología en la utilización del riego, debemos ser más eficientes en cuanto al uso del agua. Tenemos, además, un proyecto pendiente, terminar el Laja Diguillín como estaba inicialmente contemplado para incluir diez mil hectáreas en riego, principalmente agricultores que tienen poca extensión. Se debe considerar en el próximo presupuesto terminar el Laja Diguillín y no como se está haciendo ahora, con parches de la CNR. Es una decisión política.

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