Close
Radio Radio Radio Radio

“Para tranquilidad de todas y todos, reiteramos lo que ya hemos dicho con total claridad: esta Convención no va a tocar los ahorros de las personas”

El próximo viernes 29 de abril se pondrá fin al trabajo de comisiones en la Convención Constitucional. Luego, el 6 de mayo, se llevará a cabo el último Pleno previo a la etapa de Armonización, que comenzará el 17 de mayo, cuando dicha comisión tome la propuesta constitucional, y la “prepare”, de cara a la última votación del Pleno, que será el 29 de junio.

Son días decisivos los que vive el proceso Constituyente, y sobre aquello, LA DISCUSIÓN conversó con la presidenta de la Convención, María Elisa Quinteros Cáceres (Movimientos sociales Constituyentes).

  [bg_collapse view=”button-orange” color=”#4a4949″ expand_text=”Leer más” collapse_text=”Menos” inline_css=”width: 100%” ]

– Esta semana ha sido crucial para la Convención. Se ha aprobado lo que podría denominarse “el corazón” de la nueva Constitución, como es el aseguramiento de los derechos sociales (vivienda, libertad sindical, negociación colectiva, cuidados, trabajo, salud y seguridad social, entre otros). ¿Cree que puede significar un punto de inflexión desde el punto de vista comunicacional, para mejorar los índices de aprobación hacia el proceso, teniendo en cuenta que son temas que le hacen mucho sentido a las personas?

– Efectivamente ha sido una semana muy intensa y satisfactoria a la vez. Varios de los artículos que aprobamos esta semana están relacionados al reconocimiento de aquellos derechos que permiten alcanzar una vida digna. Sin duda, estos son los temas más esperados por las y los chilenos, porque son normas que mejorarán la vida de las personas en áreas como el derecho a la vivienda, la salud, la seguridad social, el acceso humano al agua, entre muchos otros. De eso se trata este proceso constituyente, a eso venimos: a redactar una Constitución que cambie las cosas para mejor, y que ponga en el centro de nuestra Carta Fundamental los derechos de las personas y su dignidad. En la medida que se vayan aprobando más artículos relacionados con los derechos fundamentales de las personas, llegaremos de mejor manera al Plebiscito de Salida para lograr la aprobación de la ciudadanía, que es el único índice de aprobación que vale.

– Las últimas encuestas no han sido favorables hacia la labor de la Convención y la propuesta que se está construyendo. ¿Qué valor le atribuye a estos sondeos? ¿Existe una autocrítica respecto del trabajo realizado y la forma de comunicar los avances?

– Por cierto, siempre hemos mirado nuestro trabajo con espíritu constructivo y autocrítico, sabiendo que hay cosas que podemos mejorar. Éste es un proceso inédito en la historia de Chile, por lo tanto, ha sido un proceso complejo que ha involucrado el esfuerzo y compromiso de muchas personas, partiendo por las y los convencionales, que constantemente estamos viendo formas de mejorar nuestro trabajo. El tema comunicacional también ha sido motivo de autocrítica. Tal como lo he señalado en otras entrevistas, estamos conscientes que lo podríamos haber hecho mejor. Sin embargo, lo importante es que nos estamos haciendo cargo de esta necesidad y estamos trabajando intensamente para mejorar la comunicación, información y difusión de las normas que estamos aprobando.

– Últimamente se ha visto a los convencionales que están por el Apruebo muy activos en sus redes sociales difundiendo los avances del proceso y recalcando qué información publicada es fidedigna o no. ¿Cómo evalúa esta misma estrategia -activo rol en redes- desplegada con anterioridad por los constituyentes de derecha? ¿Cuál ha sido el real impacto de las fake news? ¿Se está diseñando alguna estrategia conjunta entre los convencionales que están por el Apruebo para intensificar la difusión durante las semanas territoriales, que se retomarán en mayo?

– Las y los convencionales tienen todo el derecho de difundir por diversos medios lo que está ocurriendo en la CC desde su perspectiva, y no es rol de la mesa comentarlo. Difundir lo que ocurre en la CC desde el punto de vista de cada cual es legítimo y deseable. Sin embargo, hemos consensuado en el Reglamento de Ética durante la primera etapa de la Convención, que la difusión deliberada de falsedades es contraria al espíritu de probidad y transparencia, lo que sin duda hace mal al proceso, y esperamos que quienes incurren en ello recapaciten. Respecto de una posible estrategia conjunta con otros convencionales, en mi rol de presidenta, estoy completamente concentrada en la deliberación y votación de las normas y artículos en las comisiones y plenos que nos quedan durante abril y mayo. Por ahora, eso es lo que nos tiene ocupados(as).

Sistema político

– La derecha ha criticado la eliminación del Senado y su reemplazo por la Cámara de las Regiones. Arguyen que esta última no tendrá casi atribuciones -pese a que aún no se definen-, y esgrimen que en vez de potenciar la descentralización, la limitará, debido a que disminuirán los actuales representantes regionales. ¿Cuál es el principal fundamento para establecer esta Cámara territorial, y cómo contribuirá efectivamente a desconcentrar el poder?

– Tal como usted señala en la pregunta, las atribuciones de la futura Cámara de las Regiones aún no se definen, por lo tanto, no corresponde especular respecto de las atribuciones que podría tener. Con todo, la Cámara de las Regiones responde a un anhelo de descentralización del país y empoderamiento de las regiones, y eso es destacable. Además, la creación de la Cámara de las Regiones está en línea con otros artículos que hemos aprobado que van en esa misma dirección de descentralizar el país, como las autonomías para diversas entidades territoriales, como las regiones y las comunas.

– El Estado Regional, que ya está en el borrador de la nueva Constitución, concitó un gran respaldo en la Convención. ¿Por qué cree que la derecha insiste en rechazar este cambio, con la consigna de que se aumenta el tamaño del aparato del Estado y se burocratiza su accionar? ¿Es quizás una de las mayores transformaciones para el país que propondrá el texto?

– Efectivamente, el Estado Regional es una de las grandes transformaciones que ya se han aprobado en el texto, ya que conversa muy bien con lo que le comentaba en la pregunta anterior, en relación con descentralizar el país y entregar mayor autonomía a las regiones. Y se establece este Estado Regional en un marco de equidad y solidaridad entre todos los territorios del país, preservando la unidad e integridad del Estado. Esto permitirá, por ejemplo, que las entidades territoriales autónomas tengan personalidad jurídica y patrimonio propio y las potestades y competencias necesarias para gobernarse en atención al interés general de la República, de acuerdo a la Constitución y la ley, teniendo como límites los derechos humanos y de la Naturaleza. Respecto de que este cambio podría generar mayor burocracia, no hay nada que temer. Al contrario, un Estado Regional apunta a tener menos burocracia, en el sentido de que será posible resolver localmente asuntos que sean de su competencia. Finalmente, cada uno es libre de opinar lo que estime conveniente. Por cierto, cuando tenemos cambios de esta relevancia, es muy posible que se generen algunas resistencias. Sin embargo, la propuesta sobre Estado Regional que llegó al pleno fue trabajada en forma transversal, lo que da cuenta que el anhelo de descentralizar el país y empoderar a las regiones es un interés compartido por amplios sectores del país representados aquí, en esta Convención.

Agua, ruralidad y plurinación

– En el actual contexto de escasez hídrica, ¿Qué efectos prácticos tendría que la futura Constitución, de aprobarse, consagrara la inapropiabilidad del agua? Desde el sector agrícola se ha cuestionado esta medida, específicamente, el hecho que sea la autoridad política la que entregue o quite los permisos a discreción. ¿Es quizás este punto uno de los que grafica de mejor manera la incompatibilidad actual del derecho humano al agua con la legislación chilena?

– Es evidente que se requiere un nuevo trato social sobre el uso del agua, que equilibre las necesidades de las personas con las que tienen los sectores productivos. Sin embargo, ésta es una materia que aún está siendo discutida en detalle, por lo que no puedo referirme a eso en particular.

– El reconocimiento de la ruralidad como expresión territorial es un cambio total de paradigma respecto de lo que consagra la actual Constitución. ¿Podría ahondar en los alcances de este artículo ya presente en el borrador, y cómo podría cambiar la forma en que se desarrollan vastos sectores de nuestro país, entre ellos, Ñuble, la región con la mayor tasa de población rural del país (30,6%)?

– Lo que aprobamos fue un artículo que reconoce la ruralidad como una expresión territorial, donde las formas de vida y producción se desarrollan en torno a la relación directa de las personas y comunidades con la tierra, el agua y el mar. Además, se establece que el Estado promoverá el desarrollo integral de los territorios rurales. De esta manera, nos estamos haciendo cargo de una realidad muy presente en distintos territorios del país, como la Región de Ñuble, porque a través de esta norma, protegemos la forma de vida que se da en las zonas rurales.

– ¿Será ésta una Constitución ‘indigenista’? La derecha ha instalado este concepto como algo negativo. ¿Qué significa que Chile sea un Estado Plurinacional e Intercultural?

– La Plurinacionalidad es la expresión concreta del reconocimiento a los pueblos originarios en la propuesta de Nueva Constitución y va en sintonía con los tratados internacionales en materia de Derechos Humanos. Es una innovación histórica: nunca habíamos tenido como país el más mínimo reconocimiento a los pueblos originarios en nuestras Constituciones. Por eso, confiamos en que a partir de este reconocimiento histórico e inédito en nuestra historia republicana, podamos abrir un espacio para tener una relación más armónica entre los pueblos originarios y el Estado.

Derecho de propiedad e inexpropiabilidad de fondos

– ¿Cuál será el rol de la comisión de Armonización? Se criticó en un principio que sus atribuciones eran más bien “cosméticas”. Ante los cuestionamientos de proponer una Constitución ‘maximalista’, ¿Podría esta instancia simplificar el texto, de manera de hacerlo más cercano a las personas?

– Es un rol clave, ya que la Constitución debe ser un cuerpo coherente, claro, en lenguaje simple y sin contradicciones o incoherencias en su interior. Ese es el rol de la Comisión de Armonización.

– Hay dos temas que preocupan a un grupo importante de personas, y que esperan, estén claros en la nueva Constitución: el derecho a la propiedad y las herramientas necesarias ante posibles ‘tomas’, y la inexpropiabilidad de los fondos de pensiones. ¿Estarán estos puntos detallados en el texto? Si no, ¿Por qué?

– En relación con la inexpropiabilidad, el gobierno envió un proyecto al Congreso. La Convención Constitucional ha considerado que eso no es materia de texto constitucional. Los ahorros previsionales no dependen de una cláusula a nivel constitucional. Prueba de ello es que las Constituciones del mundo no tienen cláusulas de inexpropiabilidad en sus textos, incluyendo la actual Constitución que hoy nos rige.

Pero para la tranquilidad de todas y todos, reiteramos lo que ya hemos dicho con total claridad: esta Convención no va a tocar los ahorros de las personas. Esta Convención no se ha planteado avanzar en esa dirección. Ahora, más allá de esta polémica, invitaría a tener una mirada de largo plazo para ver en profundidad lo que votamos esta semana. Lo que aprobamos esta semana permite cambiar el marco previsional que hemos tenido hasta hoy, ese mismo sistema que ha entregado pensiones bajísimas para gran parte de la población. Por eso, podemos decir que lo que aprobamos permite dejar atrás las pensiones de miseria y eliminar a las AFP, tal como las conocemos. Y eso es una buena noticia.

Sobre el derecho de propiedad, la norma está en proceso, especialmente respecto de qué pasa cuando se resuelve una expropiación. Pero he visto que las y los convencionales están genuinamente preocupados de salvaguardar la propiedad de las personas como parte de los derechos fundamentales.

 

[/bg_collapse]

 

Agregar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos están marcados *

Leave a comment
scroll to top