La mañana de este viernes Carabineros exhibió el armamento que ha recuperado este año 2023 en la región de Ñuble, en las modalidades de entrega voluntaria y en incautaciones por procedimientos policiales, que suman 190, desde el 1 de enero al 21 de septiembre.
Jefa de Zona Ñuble, general María Teresa Araya, y el delegado Presidencial Gabriel Pradenas, exhibieron las armas que Carabineros ha recuperado este año, y que ya alcanza la cifra total de ejemplares alcanzados durante el año 2022.
“El año pasado priorizamos el control de armas como uno de los cuatro ejes fundamentales del trabajo de Carabineros en la región, y creamos un plan especial de fiscalización de armamento, que el año pasado consideró cinco operativos, con especial foco, en aquellas armas inscritas y que pertenecían a personas que ya ahora se encuentran fallecidas”, explicó en el inicio de la exhibición la general Araya.
Con ese impulso al control de armas, tras el establecimiento del incremento del uso de armas por parte de los delincuentes, definido a través de los análisis de los procedimientos y de las incautaciones, Carabineros potenció este plan con mayor participación en este rubro para este año 2023, a través de fiscalizaciones y controles integrales.
“De hecho, fortalecimos este control de armas con capacitación y participación de los funcionarios de las Unidades Territoriales, con los equipos a cargo del programa “Calles Sin Violencia” y con los equipos que diligencian las órdenes judiciales quienes, además, fiscalizan armas inscritas”, agregó la Jefa de Zona.
Con todo este trabajo, la Autoridad Fiscalizadora de armas, OS-11 de Carabineros Ñuble, registra este 2023 la cantidad total de 190 armas de fuego recuperadas, de ellas, 137 por entrega voluntaria y 53 incautadas en procedimientos policiales.
Además, mantiene en custodia 2.258 municiones entregadas voluntariamente y 2.315 recuperadas en procedimientos.
“Aún nos queda un trimestre del año, para seguir trabajando en esta materia, y estamos muy próximos a superar la cantidad recuperada el año pasado, cuando tuvimos 253. Todo esto lo hacemos para seguridad de la comunidad, porque cuando las armas están circulando, su mal uso, por parte de antisociales y organizaciones criminales, amenaza profundamente la seguridad de los barrios y de las familias”, puntualizó la General.
De hecho, -agregó- “Queremos que las personas confíen en el trabajo que hacen sus policías, para que no tengan la necesidad de contar con armas en casa, porque configura un peligro también”.
El delegado Presidencial Gabriel Pradenas, indicó en la exhibición que: “El temor de las personas está precisamente en el uso de armas de fuego en los ilícitos que se cometen en el país y en la región, por eso su control, fiscalización y recuperación, es vital para cerrar los ciclos, sacarlas de circulación y quitarle ese insumo a los delincuentes”.
También, señaló la importancia que tiene que la población sepa qué pasa con las armas incautadas y que vea a través de exhibiciones como ésta, cómo las bandas van robando, adaptando y creando armas para cometer delitos, y que el trabajo de Carabineros en ese control es fundamental para analizar las dinámicas de los ilícitos y poder abordarlos.
De las armas recuperadas este año, y del grupo de otras que se mantienen en custodia por procesos judiciales de años anteriores, un grupo de 75 armas se van este lunes 25 a Santiago, para ser destruidas, cerrando así el ciclo de peligro que expone su circulación.
