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El “clásico” se jugará con aforo reducido y sin hinchas curicanos

El clásico entre Ñublense y Curicó Unido, que fue trasladado al estadio Ester Roa Rebolledo de Concepción, debido a que el deteriorado césped del estadio Nelson Oyarzún, sigue en mantención para pasar la prueba de la Conmebol y llegar a la Copa Libertadores, no tendrá la emoción y el colorido de antaño en las tribunas.

Esto porque desde la Delegación Presidencial de la Región de Bío Bío, informaron que, según ratificación de Estadio Seguro, basada en el tope dispuesto por Carabineros, el aforo permitido será de solo 3 mil espectadores.

Además, se prohibió la presencia de hinchas visitantes y Ñublense no venderá tickets para este partido, calificado como clase A, porque privilegiará la presencia de sus abonados.

La autorización del partido entre chillanejos y curicanos, se enmarca en el estadio de excepción que aún está vigente en la Región del Bío Bío tras los recientes incendios forestales.

Es por esta razón el aforo reducido, que se ha repetido para los partidos, por ejemplo, de Fernández Vial y Deportes Concepción. Solo Huachipato recibió la autorización de Carabineros de Talcahuano para jugar de local con 4 mil espectadores, pero sigue siendo aforo reducido.

La fórmula

En lo netamente futbolístico, el técnico Jaime García, que está resignado a jugar en “casa ajena”, recupera a dos jugadores.

Al lateral derecho ex Universidad Católica, que rindió de buena manera cuando no estuvo Cerezo, Raimundo Rebolledo y el volante Juan Leiva, ambos expulsados en el choque frente a la Universidad Católica.

También tiene como alternativa al extremo derecho, Bayron Oyarzo, quien tras superar una dolencia en su rodilla derecha, ya sumó minutos en la derrota con Everton por 1-0 en Sausalito y fue figura el año pasado en el cuadro curicano.

Ñublense no gana hace cinco partidos, suma 8 puntos y marcha undécimo en la tabla de posiciones, mientras que los curicanos, asoman en el lugar 13, con 7 unidades, vienen de quedar eliminados en la fase previa de la Copa Libertadores, a manos de Cerro Porteño y no ganan hace 7 jornadas (5 por el torneo nacional y los dos partidos que jugó por la Copa Libertadores)

La última vez que se enfrentaron fue el 31 de octubre en La Granja, donde los diablos rojos vencieron por 2-1, con goles de Alexander Aravena y Nicolás Guerra, quienes emigraron a la UC y la U, respectivamente.

Con esa victoria, en un estadio lleno de hinchas curicanos, el Rojo quedó un pie en la fase de grupos de la Copa Libertadores 2023, sueño que abrazo a la semana siguiente tras igualar con Colo Colo en Chillán y que comenzará a vivir desde abril.

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