La preocupación por el estado de las veredas de calle Bulnes, en el centro de la capital regional, se vio reflejada en sesión de Concejo Municipal, donde su presidente y edil de la comuna, Camilo Benavente, expuso el problema no resuelto de abandono de trabajos, y propuso interponer un recurso de protección en contra de Serviu, entidad a cargo del proyecto; moción que fue apoyada por unanimidad por todos los concejales y concejalas presentes.
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“El Concejo Municipal hoy determinó presentar un recurso de protección en contra del Serviu, organismo que tiene y es su responsabilidad el proyecto de la construcción de veredas desde Libertad al norte de la ciudad. El proyecto no ha avanzado nada, no tenemos la información adecuada, por lo tanto creo que es una buena decisión, para estar informado, y saber los tiempos reales de lo que significa esta demora tan importante, en una responsabilidad que es de una institución que no es la Municipalidad de Chillán”, afirmó el alcalde Camilo Benavente.
Sumado a esto, la Dirección Jurídica Municipal analizó el problema, concluyendo que el recurso debe manifestar la inquietud por parte del cuerpo colegiado municipal relativo al mal estado de las veredas y el lento avance de las obras, que en la actualidad están paralizadas.
El principal objetivo es acelerar el proceso de construcción y término de los trabajos, teniendo en consideración que en marzo asumirá un nuevo Gobierno, y este tomará meses en instalarse y en retomar el caso nuevamente. En cuanto a los plazos del recurso, el concejal Joseph Careaga planteó la consulta de cuánto tiempo demandará la tramitación de este, y en resumen podría tomar más de un mes, pero se dejó en claro que lo relevante es dejar un precedente y mensaje para apresurar el proceso.
En estos momentos, tomando como referencia Avenida Libertad, hacia el sur el proyecto de refacción de veredas está en manos del municipio, si bien se ha dilatado el término de las faenas, a la fecha se está avanzando en más del 90% y está pronta a ser terminada. Sin embargo, hacia el norte las veredas están intervenidas por tramos, donde hay cemento y tierra, desde 18 de Septiembre por Bulnes hasta Vega de Saldías, sin señalética o medidas de precaución, ni personal trabajando en el área.
La concejala Brígida Hormazábal comentó en la instancia que es necesario aclarar a la comunidad que la responsabilidad recae en Serviu y no en el municipio. “No importa el tiempo, sino que importa el impacto social. Como concejo, políticamente podemos dar una señal transmitiendo la molestia que tiene la comunidad en general, ya sean peatones e incluso quienes se movilizan en vehículo, por todos los deterioros que hay”.
En esa misma línea, el concejal César Riquelme se adhirió a las palabras de la concejala Brígida Hormazábal y comentó que “nosotros como representantes de la comunidad, es nuestro deber realizar acciones en beneficio de ella”. Agregó que quizás se adelante la ciudadanía con este recurso, ya que es un daño importante que se hizo a la ciudad.
A su vez, la concejala Quenne Aitken dijo que la ciudadanía pregunta por qué este tema no se soluciona y no tiene claridad de quién es la responsabilidad, lo que genera una complicación que repercute finalmente en el municipio. “No podemos permitir que se traspasen problemas al futuro gobierno (…), por eso tenemos que tomar las acciones que son necesarias para resguardar a nuestra comunidad y también si ocurre un accidente se haga responsable los que tienen que hacerse responsables”, expresó.
A lo largo de calle Bulnes se encuentran diversos paraderos de diferentes buses de transporte público mayor, urbano y rural, para otras comunas cercanas a Chillán, como Quirihue, Ninhue, San Carlos, San Nicolás, Cobquecura, entre otras.
La Discusión contactó al Serviu, sin recibir respuesta hasta el cierre de esta edición.
Texto: Antonieta Henríquez
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