“Amarillos por Ñuble” se constituyó en la región al alero del pacto “Amarillos Rechazo por la Esperanza”, asociación de ciudadanos independientes de centro y centro izquierda, que están por la opción Rechazo.
Según explicó Reinaldo Figueroa, coordinador regional de la organización, “consideramos que esta propuesta Constitucional se funda en ideas extremas, que generan un régimen de gobierno sin los debidos contrapesos, donde abunda la dependencia de tipo política en los poderes del Estado. Vale decir, se rompe con la valiosa tradición republicana que hemos tenido y con la igualdad de todo nacional ante la ley al basarse esta propuesta en la primacía de la raza”, afirmó.
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Figueroa agregó que “se trata de una propuesta de una minoría que presiona a una mayoría que lo que quiere es ver restablecido el orden y la seguridad en el país, y que quiere ver también a las autoridades de gobierno centrarse en alcanzar mayores niveles de desarrollo y crecimiento, y también, ver superados los problemas que le afectan, pero sin la destrucción o refundación de las instituciones”.
Una de las principales preocupaciones de Amarillos es el supuesto intervencionismo del gobierno, “el proselitismo en favor de una opción. Estimamos que acciones como las que hemos visto minan la credibilidad de las autoridades de gobierno y la confianza en ellas mismas. Se le propina al país en su conjunto y a la democracia, un daño innecesario”, aseveró, al tiempo que están al pendiente de “las consecuencias de la desatada inmigración, el creciente deterioro en la convivencia, la delincuencia, el narcotráfico y el terrorismo al sur del Biobío, al igual que el alza en el costo de la vida”.
¿Cómo sigue el proceso Constituyente?
Respecto de la propuesta de Amarillos en torno a cómo continuar con el proceso Constituyente en caso que gane la opción Rechazo, Figueroa sostuvo que tienen el convencimiento “que el ciudadano común y corriente no tiene especial interés por temas constitucionales, no obstante también estamos convencidos que una nueva propuesta o una modificación de la actual Constitución sería mucho más propicio hacerla en el parlamento”.
Álvaro Arévalo, vocero comunal Chillán de la agrupación, agregó que “en caso que gane el Rechazo, hay varias propuestas, pienso como Ernesto Ottone, que lo más rápido sería modificar la actual Constitución, lo que nos haría ahorrar $30 mil millones por concepto de proceso constituyente. También está la idea de la senadora Rincón y otros de la DC de discutir el mecanismo, con la participación de expertos constitucionales o con la participación del congreso, algo que habría que plebiscitar nuevamente”, aseveró, añadiendo que “creo que la mayoría de la gente en Chile quiere una nueva Constitución, lamentablemente este proyecto que nos presentaron fue desilusionante, porque todos queríamos una casa que cobijara a todos, y salió una ruca solo para algunos. Después de un año de proceso, el país está más dividido y se supone que cuando se busca una nueva Constitución, debe haber unión, puntos en común, independiente de la ideología política”, sentenció.
