La empresa Inversiones Bosquemar Ltda. Ingresó este jueves al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) de la región de Ñuble el proyecto “Parque Renovable Entre Cerros”, consiste en la construcción y operación de un parque eólico, un parque fotovoltaico y una línea de transmisión, obras que representarán una inversión de 100,3 millones de dólares.
Tanto el parque eólico como el solar, que se presentaron a evaluación a través de una Declaración de Impacto Ambiental (DIA), se emplazarán en la comuna de Portezuelo -a unos 3 kilómetros de la zona urbana-, mientras que la línea de transmisión se extenderá desde ambos parques hasta la subestación Hualte, en la comuna de Ninhue.
Desde la empresa justificaron la localización del proyecto “dadas las buenas condiciones dinámicas de los vientos, recurso solar y el adecuado contexto territorial, por ejemplo, uso del suelo preferentemente forestal en el área de influencia (45,26% del área), buena condición vial e interconexión al SEN, que hacen de la zona un lugar atractivo y de interés para la materialización de parques eólicos”.
Según se indicó en el documento, el parque eólico generará energía eléctrica a partir de la energía cinética del viento, la cual se produce por el movimiento de las aspas, y posteriormente entregada al generador en la nacelle o góndola. Tendrá una potencia máxima instalada de 46,2 MW y estará conformado por 11 aerogeneradores de 119 metros de altura (198 metros incluyendo las aspas), los que se emplazarán en una superficie de 46,6 hectáreas en una zona montañosa de la Cordillera de la Costa.
En tanto, el parque fotovoltaico captará la energía proveniente del sol por medio de paneles fotovoltaicos, con una potencia máxima de 43,8 MW y 81.520 módulos solares instalados, los que ocuparán una superficie total de 61,7 hectáreas.
Asimismo, la energía generada por ambos parques será evacuada a través de una nueva línea de transmisión eléctrica, de 66KV, de una longitud aproximada de 14,33 kilómetros -utilizará una superficie total de 53,1 hectáreas-, la que se conectará a la subestación Hualte, ya existente, para luego ser distribuida al Sistema eléctrico Nacional (SEN).
De acuerdo a la DIA, se prevé que las faenas de construcción comiencen en julio de 2023 y se extiendan por 24 meses, las que demandarán una mano de obra promedio de 100 trabajadores, con un peak de 170.
Asimismo, en el documento el titular destacó que la iniciativa apunta a “contribuir en mitigar el efecto invernadero, reduciendo el consumo de combustibles fósiles para la generación de energía eléctrica”.
El primero de Ñuble
Al respecto, el seremi de Energía, Manuel Cofré, subrayó que se trata del primer parque eólico que se desarrollará en la región, aprovechando las ventajosas condiciones que ofrece la Provincia de Itata para el aprovechamiento de esta energía. “Itata tiene mucho potencial fotovoltaico y eólico”, enfatizó.
En esa línea, adelantó que “Entre Cerros” es el primero de cuatro proyectos eólicos que debieran someterse a evaluación ambiental en los próximos meses -en las próximas semanas ingresaría al SEA un segundo proyecto- y que se emplazarán en Itata, lo que aseguró, “da cuenta de las grandes proyecciones que tiene este tipo de energía en la región y en el país, así como del gran dinamismo que exhiben las inversiones en energías limpias”.
Cofré detalló que, si bien Bosquemar es una empresa penquista desarrolladora de proyectos, este tipo de iniciativas se financian gracias a inversionistas chilenos y extranjeros que han apostado por las ventajas de Chile en esta materia.
“Esta es una muy buena noticia, la energía eólica tiene un mayor factor de planta que la solar, entonces, es un complemento grande y es mucha energía”, aseveró el seremi.
La autoridad planteó que “todos estos proyectos requieren transmisión y esto va en línea con los proyectos de transmisión que están en ejecución en la región, por acá van a pasar líneas de alta tensión, como la Mataquito-Hualqui”.
Cofré manifestó que si bien el proyecto aún no ha sido aprobado por las autoridades ambientales, comentó que, en general, este tipo de iniciativas no generan gran rechazo, porque se trata de energías limpias que contribuyen al objetivo de la descarbonización de la matriz energética del país.
En particular, el titular de Energía planteó que este tipo de proyectos abren el camino para que la región pueda ser productora de hidrógeno verde.