Dos masivos operativos realizados por la Policía de Investigaciones de Chillán, más refuerzos de la Región Metropolitana y del Biobío, permitieron no sólo la recuperación de tres vehículos robados con una violencia pocas veces vista en la zona, sino que la detención de cuatro delincuentes a quienes se les imputa tanto la autoría de estos asaltos como la receptación y otros ilícitos.
[bg_collapse view=”button-orange” color=”#4a4949″ expand_text=”Leer más” collapse_text=”Menos” inline_css=”width: 100%” ]Los cuatro, de entre 17 y 25 años, con domicilio en Pinto y en la Villa Las Almendras, más conocida como la población Las Habas, de Chillán, lugar en el que además se incautó una camioneta que fue utilizada en los atracos.
La segunda intervención, se realizó, precisamente, en la comuna de Pinto, lugar en donde finalmente la Brigada Investigadora de Robos (Biro) de la PDI encontró en diversos allanamientos vestimenta y calzado oficial de Carabineros y de Gendarmería, además de municiones y armamento.
El primer asalto, se registró en la madrugada del 22 de febrero, en la población El Roble, ocasión en que una joven de 21 años fue víctima de una encerrona por parte de los detenidos quienes iban a bordo de un Nissan V16 “enchulado”, quienes la encañonaron para hacerla bajar y quitarse su vehículo, un Kia Morning año 2014.
Respecto a los otros dos robos, se registraron con sólo minutos de diferencia durante la noche del jueves.
El primero, afectó a un trabajador de Conaf, quien conducía por calle Vicente Méndez cuando a la altura de la Universidad de Concepción, dos delincuentes quienes descendieron de otro auto, lo encañonaron, obligándolo a bajar de su camioneta.
El delito le significó perder, además, su equipo de geomensura, avaluado en cerca de $6 millones, el que finalmente fue recuperado por el personal policial.
Y de acuerdo al relato policial, fue a bordo de un vehículo station wagon color negro, que los asaltantes llegaron hasta el Supermercado Jumbo, de la misma avenida, para -mediante el mismo modo de operar- obligaron a una familia, en la que incluso se encontraba un lactante, para arrancar a bordo de su Toyota Runner, por calle Paul Harris, en dirección al poniente, chocando a otros dos automóviles en el escape.
Más allá de los detalles propios de la investigación y del operativo, la fiscal regional, Nayalet Mansilla se refirió al impacto que el modo de operar de los detenidos que generó en la comunidad.
“No habíamos tenido en el último tiempo delitos de violencia con encerronas y otros métodos que normalmente vemos en ciudades más grandes, lo que causa preocupación en la población, por lo que como Fiscalía de inmediato se pondrá el foco en investigar este tipo de delitos que ya probablemente hablan de otro tipo de delincuencia y de bandas criminales”, dijo.
En tanto, el jefe policial regional de la PDI, prefecto inspector Juan Carlos Carrasco, adelantó que “tenemos que ver si esta banda tiene más redes en otras ciudades, además de otros participantes que puedan tener alguna influencia en esta ciudad o en otros delitos”.
Al respecto, el Juzgado de Garantía emanó ya una orden de detención en contra de otras dos personas quienes serían los cómplices en el delito de robo.
Entre los detenidos, Byron Sepúlveda Figueroa participó en los tres robos, informó la Fiscalía.
Tras controlarse la legalidad del arresto de los imputados, se amplió el plazo detención hasta este sábado.
Un 170% más de casos
Conforme a las estadísticas proporcionadas a LA DISCUSIÓN, por la Coordinación Regional de Seguridad Pública, al comparar los meses de enero y febrero de los años 2021 y 2022, nos encontramos con que en la presente temporada se han denunciado 37 casos más de robo de vehículos que en ese tramo del año pasado.
Con estos 37 casos, se totalizan 65 este año, incluyendo estos últimos tres. De ellos, 30 se han cometido en lo que va del mes de febrero.
“Hay que tener en cuenta que el año pasado estábamos en otra situación y las restricciones sanitarias que significaba que hubiera menos personas y menos vehículos circulando por las calles, sin embargo, no son cifras que nos dejen contentos, porque nos demuestran que es un delito que va al alza, pero además lo que nos parece más alarmante es el grado de violencia y el cambio de comportamiento, lo que nos obliga a tomar todas las medidas necesarias”, explicó el coordinador de Seguridad Pública, Alan Ibáñez, quien de todas maneras, advirtió que el robo de vehículos de manera violenta es un fenómeno que se está repitiendo con alta frecuencia, a nivel nacional.
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