El año 2023 partió con un fuerte incremento en la generación de energía eléctrica en la región de Ñuble, dado que según el INE, en enero totalizó 67.887 MWh, lo que representa un incremento de 29,2% en comparación con enero de 2022 y un aumento de 10,6% respecto a diciembre de 2022.
Así, ya son siete meses consecutivos con una variación positiva de la generación, impulsada por la puesta en operaciones de proyectos fotovoltaicos, cuyo factor de planta aumenta en primavera y verano, por la mayor cantidad de horas con radiación solar.
Según el INE, el fuerte aumento de la generación en enero se explicó por la incidencia de las fuentes solar e hidráulica (Otras Fuentes), que totalizó 33.484 MWh, anotando un aumento de 45,1% en comparación con enero de 2022 y de 10,6% respecto a diciembre. De esta forma, la categoría Otras Fuentes aportó con el 49,3% de la generación total.
En tanto, la energía generada a partir de fuentes térmicas en la región, como el diésel y la biomasa, totalizó 34.403 MWh, aumentando en 4.942 MWh (16,8%) al comparar con enero del año anterior. Esta categoría aportó el 50,7% de la generación total. En este caso, la mayor producción responde a la mayor demanda del sistema durante el verano y que se extiende también a aquellas horas en que los parques solares dejan de inyectar energía.
Según el INE, el consumo de energía eléctrica en la región alcanzó 73.908 MWh en enero, lo que representó un crecimiento interanual de 2,4% y de 3,4% respecto a diciembre. Lo anterior se explicó, en parte, por los sectores Residencial y Agrícola, que presentaron variaciones interanuales de 5,3% y 16,0% respectivamente.
Nuevos proyectos
El rápido crecimiento de la potencia instalada de generación en la región respondió al boom de inversión en pequeños medios de generación distribuido (PMGD), “que tuvieron la ventaja de un precio estabilizado fijo al conectarse a redes de distribución, incentivo que se aplicó a todas las centrales de hasta 9 MW que hasta octubre de 2022 hayan declarado su construcción”, explicó el seremi de Energía, Ricardo León.
Sin embargo, sostuvo que la tendencia al alza en la participación de fuentes renovables en la matriz energética regional se mantendrá por un buen tiempo, pues ahora están presentándose proyectos de mayor envergadura, tanto fotovoltaicos como eólicos, que contribuirán a multiplicar varias veces la potencia total instalada en la región.
Además, para enfrentar el problema del factor de uso, los nuevos proyectos están incorporando equipos de almacenamiento de energía, los que permitirán inyectar energía al sistema cuando no haya suficiente radiación solar o viento.
Solo este año se han presentado a evaluación en el SEA de Ñuble tres proyectos fotovoltaicos que suman una potencia de 42,8 MW y una inversión de US$87 millones.
Se trata del Parque Fotovoltaico El Cachudito, en la comuna de Chillán, con una potencia instalada de 24 MW, contará con sistema de almacenamiento y representa una inversión de US$66 millones; FV Aldea, en Chillán, de 8 MW, también tendrá almacenamiento y la inversión alcanzará los US$12 millones; y el Parque Solar Aris, en Bulnes, con una potencia de 10,8 MW y una inversión de US$9 millones.
