La fiscal Marcia Venegas Barba obtuvo prisión preventiva para el gendarme Juan González Balboa, quien fue formalizado por cohecho, asociación delictual e ingreso de teléfonos a establecimiento penitenciario, puntualmente a la cárcel de Chillán, donde se desempeña. El imputado, quien está suspendido de sus funciones por estos hechos, deberá cumplir la medida cautelar en el penal de Concepción.
La fiscal expuso en la audiencia de formalización que el funcionario público, al menos desde junio de 2023 formó parte de una asociación delictual, que incluía a dos internos de la cárcel y la madre de éstos, cuyo fin era ingresar teléfonos móviles, cargadores y otros artefactos necesarios para operarlos al citado centro de reclusión.
Con lo anterior, el imputado buscaba que “personas privadas de libertad los utilizaran, para lo cual abusaba de su condición de empleado público, específicamente gendarme asignado a la guardia interna”, precisó la fiscal Marcia Venegas. Acotó que “recibió a cambio beneficios económicos, incluyendo el pago de dinero en efectivo o especies”.
La investigación fue realizada con la Oficina de Seguridad Interna (OSI) y el Departamento de Investigación Criminal, ambos de Gendarmería de Chile, y con apoyo para los allanamientos de la Brigada Antinarcóticos y contra el Crimen Organizado (Brianco) de la PDI de Ñuble.
El Director Regional de Gendarmería, coronel Juan Navarrete Gamboa, expresó que “gracias al trabajo de investigación que inició Gendarmería se coordinó la investigación con la Fiscalía y la PDI, lo que permitió detener a un funcionario del Centro de Cumplimiento Penitenciario de Chillán que se alejó de la doctrina institucional y trató de ingresar elementos prohibidos al penal, por lo cual fue suspendido inmediatamente de sus funciones y será alejado de la institución”.
El Juzgado de Garantía de Chillán dio tres meses de plazo pata la investigación de la Fiscalía.
