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la Estación de monitoreo Purén -ubicada al sur de Chillán- ha registrado entre abril y julio de este año, un total de 30 episodios críticos en que los niveles de material particulado MP2,5, el más nocivo para la salud, superaron los 80 ug/m3 lo que representa un 25% de disminución en comparación a igual periodo de 2018. El monitor Inia, emplazado en el norte de la comuna, no muestra registro de ningún día crítico.
Tres de los episodios medidos por el monitor Purén corresponden a Emergencia, cinco menos que el año pasado. Sin embargo, ninguna Emergencia ha sido declarada por la Intendencia este año, con un total de 27 episodios decretados.
El experto en gestión de calidad del aire de la Universidad de Santiago, Luis Díaz Robles, explica las diferencias entre un episodio decretado y uno efectivamente constatado. “En el episodio constatado se ratifica o no el pronóstico del episodio declarado, que decreta el intendente, es el resultado del pronóstico del modelo que corre a nivel central en el Ministerio de Medio Ambiente. El ministerio le entrega la información a la Intendencia y se toma la decisión si se decreta o no Alerta, Preemergencia o Emergencia, pero eso es un pronóstico”, advirtió.
Díaz precisó que “lo ideal es que siempre que el episodio que decrete el intendente después se constate y que sea evidente, sería un modelo ideal, el modelo de pronóstico a veces tiene algunas incertidumbres. Las mediciones que se hacen en las estaciones de monitoreo sirven para verificar si es que el episodio declarado estuvo bien pronosticado”.
Causas de la disminución
El seremi (s) de Medio Ambiente, Michael Vera, consideró que “los factores pueden estar relacionados a las temperaturas, las cuales no han estado muy bajas -solo en ocasiones puntuales bajaron de los cero grados-, las condiciones de ventilación y aumento en las precipitaciones. También podemos decir que el desarrollo e implementación del programa de recambio de la Seremi de Medio Ambiente y el Gobierno Regional, de las distintas campañas de difusión y educación ambiental, sumado a las fiscalizaciones de la Seremi de Salud, son un componente importante en la sensibilización de la población, que está más consciente de la importancia de la calidad del aire”.
El programa de recambio, una de las dos medidas estructurales del Plan de Prevención y Descontaminación Atmosférica (PPDA) busca reemplazar alrededor de cinco mil aparatos a 2020. Se registraron más de cuatro mil inscripciones. Aún no comienza el proceso de entrega de los calefactores.
Luis Díaz evaluó que “si es más lluvioso quiere decir que hay una mayor probabilidad de que la meteorología ayude a descontaminar. Cuando hay años más lluviosos obviamente hay menos episodios, y eso no deja claro si efectivamente el PPDA es el que está generando estas reducciones o se debe a una condición meteorológica más favorable”.
Fiscalizaciones y sumarios
La seremi de Salud, Marta Bravo, informó que en lo que va del año se han patrullado 79.380 viviendas, con 248 sumarios por incumplimientos a las medidas dispuestas en el PDA. “Este año se han registrado 17 alertas y 10 preemergencias, siendo el motivo de las infracciones, el incumplimiento de los 15 minutos máximos para emisiones de humos visibles desde sistemas de calefacción domiciliaria a leña. También hay un sumario a la empresa Masmadera, en Chillán Viejo, por hacer funcionar una caldera durante un episodio con restricción para ese tipo de fuente de generación”, detalló Bravo.
Y agregó que las fiscalizaciones se centran en los macro-sectores con mayor densidad poblacional y concentración de humo, como el suroriente y nororiente de Chillán, Parque Lantaño, San Cristóbal, Quilamapu, Las Mariposas, entre otros. La Seremi de Salud fiscaliza cuando el episodio crítico es decretado por la Intendencia, lo que este año ha diferido en tres oportunidades de lo medido por la Estación Purén.