El alcalde, Camilo Benavente se refirió ayer a la denuncia por notable abandono de deberes interpuesta por tres concejales ante el Tribunal Electoral Regional (TER), acusación que se divide en 27 cargos relacionados, entre otros aspectos, por la contratación de personal a honorarios y utilización de recursos públicos.
La acción fue encabezada por Quenne Aitken (PC), Joseph Careaga (UDI) y Juan Pablo López (PR) en base a un informe de Contraloría General de la República, que ahora el jefe comunal espera sea contradicha por la Contraloría Nacional, ya que a su juicio sanciona hechos que serían legales.
Leer también: Presentan denuncia por abandono de deberes contra el alcalde de Chillán
“Una de las acusaciones de alta complejidad que hace la Contraloría es que contratamos a 17 personas que trabajaron en esta campaña, lo que no es ilegal ni está prohibido en ninguna parte porque la ley entiende que en este tipo de instituciones las lealtades profesionales y los cargos de confianza son necesarios”, apunta el jefe comunal.
Respecto a la acusación que apunta a la contratación de un familiar, quien se desempeña en la Dideco, el alcalde explica que la Ley sí lo permite cuando se trata de familiares con un grado de lejanía de más de tres grados, “y en este caso se trata de un ingeniero que es primo mío, y los primos son parientes en cuarto grado, por lo que me extraña que el señor contralor cuestione algo que la ley dice que sí se puede hacer”.
Respecto a otras acusaciones que conforman el documento contralor, Benavente asegura que se trata de problemas administrativos no asociables a actos de mala fe. A juicio suyo son errores comunes a todas las reparticiones públicas, por lo que sancionar con base en estos puntos podría generar una jurisprudencia que “causaría “un terremoto en los servicios públicos de todo el país, porque las gobernaciones, las intendencias o las municipalidades todos los días se enfrentan a problemas difíciles y se deben tomar decisiones rápidas, entonces es lógico que se cometan errores y sin duda se seguirán cometiendo. No estoy tratando de jugar al empate, pero si las revisas te das cuenta que se trata de irregularidades administrativas que esperamos ir mejorando”.
La vieja política
Respecto a la intención que el vio en la presentación de los tres concejales al TER, Benavente dice que “son prácticas de la vieja política que buscan enlodar nuestra gestión y me parece lamentable. Sin embargo son esas estrategias en las que ya la gente no cree”.
Asegura también que nadie de su equipo parece afectado por esta situación. “Se sigue trabajando en todos los proyectos con total normalidad, porque quienes presentan esta acusación saben que no prosperará, pero buscan enlodar una gestión que se ha centrado en recuperar y mejorar nuestra ciudad.
Aunque dice que incluso lo han llamado representantes de algunos de los partidos a los que pertenecen los concejales denunciantes para brindarles apoyo, admite que “estas situaciones muchas veces afectan a personas cercanas como amigos o a la familia, gente que no tienen nada que ver con la política y es difícil explicarles lo que sucede”.
Benavente presentó una solicitud de reconsideración de los hechos al Contralor Nacional, “así que estamos a la espera de lo que resuelva”.
Hasta el momento, ninguno de los otros siete ediles que forman parte del concejo municipal de Chillán se estarían sumando a las denuncias hechas en Contraloría contra el alcalde, Camilo Benavente.
