Amigos, organizaciones sociales y asociaciones feministas se reunieron ayer en el frontis de la Delegación Presidencial para exigir justicia para Gloria Moraga, la única víctima de trauma ocular durante el estallido social en la Región de Ñuble.
Moraga fue informada que el Ministerio Público cerrará la investigación del caso, por no tener mayores antecedentes, decisión que el tribunal de Garantía acogió.
“Creemos que existe bastante negligencia en la investigación que el Ministerio Público cerró, y necesitamos tener a algún responsable para que Gloria Moraga pueda tener justicia y reparación”, sostuvo su abogada, Josefa Balmaceda.
A partir de ahora, es el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH), como querellante, el que puede apelar dentro de cinco días hábiles.
Gloria Moraga, quien el 20 de octubre de 2019, en medio de una manifestación en Chillán, se acercó a ayudar a un joven que era arrastrado por uniformados y fue herida en el rostro, impacto que le hizo perder un ojo; manifestó que “es el INDH el que tiene ahora la potestad. Hoy (ayer) se cerró el caso, y si no apelan, esto quedará impune. Como víctima, mi sentimiento es que no he tenido justicia. Todo se ha hecho mal, las diligencias de las pruebas no ha sido eficaz, y Carabineros ha entregado información errónea desde el día en que me agredieron. El Ministerio Público, además, no ha investigado bien los hechos”, expresó.
Gloria Moraga añadió que tuvo la oportunidad de conversar con la senadora Fabiola Campillai, quien intercedió por ella ante el INDH para solicitar que no se cierre la causa. “Muchas casos se están cerrando a nivel nacional porque no hay querellantes. El INDH tiene muy pocas querellas, y no queremos que las 467 víctimas de trauma ocular queden en la impunidad”, aseveró.
