Tras una presentación realizada por el superintendente de Medioambiente, Cristian Lineros, ante el concejo municipal de Chillán, quedó en evidencia que la comunidad en general ha tomado un rol mucho más activo e informado respecto al resguardo del medioambiente en la comuna y en la región en general.
En la presentación, gestionada por la concejal Marina Crisóstomo, se entregaron cifras que mostraban, por ejemplo, que en estos tres primeros meses del 2023, a la Superintendencia, ya habían ingresado 163 denuncias en total; mientras que el 2022 cerró con 457.
La alza, sin embargo, se ha venido evidenciando desde antes incluso. Se registraron 273 en el 21, otras 70 en 2020; 50 en 2019 y 47 durante el año 2018.
Para Cristian Lineros, esto se explica porque “después de la pandemia, las denuncias se dispararon. Teníamos más personas en sus casas por lo que hubo una mayor cantidad de requerimientos administrativos. Ejemplo de eso es que este año, tras una solicitud de una junta de vecinos del sector de Flores Millán, paralizamos una obra de construcción de un edificio en el que se trabajaba con autorización municipal, pero realizando faenas fuera de los horarios autorizados”.
Al analizar las cifras y estadísticas regionales, se advierte que los principales denuncios corresponden a malos olores, descargas de aguas servidas y extracción ilegal de áridos.
Sin embargo, “en la comuna de Chillán, la principal denuncia tiene que ver con ruidos molestos, específicamente en horarios nocturnos, después de las 9 de la noche.
Presencia de vectores, gestión de residuos, malos olores, materia de áridos, comercio ilegal de la leña, y hoy, por tema de seguridad, aparecen las quemas de basura, rastrojos o pastizal”, precisó Lineros.
Una ordenanza que se replica
En la SMA explican que otra de las explicaciones para exhibir una mayor cantidad de procesos sancionatorios en curso, obedece al respaldo que les significó en materia de fiscalización la nueva ordenanza medioambiental creada por el concejo municipal de Chillán, en materia de extracción de áridos.
“Creo que es el avance más sustancial que hemos logrado con el municipio, porque hemos coordinado actividades con el equipo de seguridad, con la dirección general de aguas, abordando de forma integral materias de ruido, regularización de pagos de patentes comerciales, pago de derechos municipales, modificaciones de cauce. Hoy estamos intentar replicar en otras comunas, la ordenanza que se generó en Chillán y también en ciudades de otras regiones” comentó.
Pese a esto, al revisar el histórico de denuncias que se consolidan en la SMA, el ítem con más causas el que respecta a los malos olores (540) y que ha motivado multas (en Bulnes el año 2023) de más de $7.500 millones.
La mayoría corresponde a planteles porcinos y otras fuentes que totalizan 52 en la región, de ellas 20 en Chillán.
Le siguen las denuncias por ruidos (410), emisiones Atmosféricas (307), vectores (248) y contaminación (179).
En cuanto a materias de contaminación del aire, se observa una baja sustancial en cantidad de días con episodios críticos. “Desde que partió el Plan de Descontaminación van 38 días de episodios críticos y hemos visto que Chillán se ha acostumbrado bastante a operar con un comercio formal de leña seca”, añadió.
Texto: Diego Chacana
