Luego del resultado del plebiscito del pasado domingo, el gobierno inició de lleno una nueva etapa, pensando ya en el segundo tiempo de su administración.
Fue el propio Presidente Gabriel Boric quien anunció que se retomaría la urgencia de las reformas de pensiones y tributaria en el congreso. Es más, la ministra del Trabajo, Jeannette Jara, divulgó una propuesta respecto de la reforma de pensiones, que fija un 1% del 6% de cotización extra para destinarlo a empleo y formalización para las mujeres; 2% para capitalización individual, y 3% para un seguro social y transitorio.
Sus palabras no lograron convencer a los legisladores de oposición, entre ellos, los representantes de Ñuble, que tienen bastante qué decir, al liderar algunas bancadas y partidos.
“Nosotros, por un lado, nos alegramos que el gobierno retome la agenda y ya cerremos este proceso constitucional que nos ha tenido paralizados prácticamente cuatro años”, sostuvo el jefe de la bancada de senadores de la UDI, Gustavo Sanhueza.
Añadió que “en cuanto a las palabras de la ministra del Trabajo, vemos que se insiste en lo mismo, nosotros hemos sido claros que no puede haber nada del 6% que vaya a reparto. La PGU es un sistema de reparto que se tiene que mantener, con impuestos generales. Entonces, creo que se está insistiendo en lo mismo, nosotros no estamos disponibles para aprobar reformas que finalmente no vayan en la línea de lo que la ciudadanía ha manifestado claramente, y en ese sentido, más del 70% de los chilenos quiere que la capitalización adicional vaya a su cuenta individual”, insistió.
Sanhueza destacó: “estamos abiertos a otro tipo de proyectos, por ejemplo, a mejorar la pensión de las mujeres, que todos sabemos que producto de diferentes motivos tienen una menor pensión. En ese sentido, creo que podemos avanzar, pero vemos que el gobierno sigue en la misma línea. Y lo otro que le queremos plantear al gobierno es que nosotros no podemos seguir avanzando en otro tipo de proyectos mientras no tengamos avances en materia de seguridad. Esa es la principal angustia que tienen los chilenos. Todo lo otro pasa a un segundo plano mientras no existan las condiciones de seguridad, y para eso tenemos que fortalecer la agenda legislativa respectiva”, manifestó.
Otro actor importante en el congreso para destrabar, por ejemplo, la reforma de pensiones o el pacto fiscal, es el jefe de bancada de los diputados de RN, Frank Sauerbaum.
“Siempre los tiempos son escasos cuando hay malos proyectos que se trancan porque no son compartidos en el parlamento, ni por la ciudadanía. Nosotros no estamos disponibles para aprobar, por ejemplo, un pacto fiscal que considere alza de tributos. Sí estamos evaluando la aprobación de todo lo que tenga que ver con terminar con evasión y elusión tributaria, hay que luchar contra eso decididamente”, insistió.
Además, dijo, “hay que poner el foco en la reactivación económica y todo lo que tenga que ver con ‘permisología’ para aprobar inversión y generación de nuevos puestos de trabajo. En Chile hoy día tenemos un millón de cesantes, y debe ser la gran preocupación junto con materias de delincuencia”.
En materia previsional, aseveró, “no estamos disponibles para aprobar un sistema de reparto que es lo que propone el gobierno. Por lo tanto, aunque dilatemos esta discusión nos vamos a enfrentar a un rechazo, porque nosotros vamos a defender la propiedad de los fondos de pensiones de los trabajadores, porque creemos que es una mala política pública hacer un sistema de reparto que es insostenible en el largo plazo. Y ahora se introduce un elemento nuevo, que es que con la cotización previsional de los trabajadores se va a pagar la sala cuna, es decir, se trasgreden todos los principios de seguridad social que existen y no tiene ninguna relación con la propuesta inicial del gobierno. Por lo tanto, nosotros llamamos al gobierno a en vez de demandarnos el diálogo, que usen su tiempo para mejorar los proyectos, en vez de seguir insistiéndonos a nosotros, a obligarnos a sentarnos en una mesa de proyectos que no compartimos”.
“Ceder en su ideología”
Desde el Partido Social Cristiano, su presidenta, la diputada por Ñuble, Sara Concha, planteó que “la disposición a conversar sobre las reformas siempre existe, y cuando el gobierno sea capaz de ceder en su ideología, en favor de las personas, recién vamos a poder ver avances, porque acá no hay doble lectura. Los ahorros de los trabajadores y su heredabilidad las vamos a defender siempre”.
La diputada de la UDI, Marta Bravo, también mencionó que “siempre hemos estado disponibles a sacar adelante una reforma de pensiones que permita mejorar las actuales y las futuras jubilaciones. Por eso le hemos propuesto al gobierno que separe la PGU de la actual reforma, de manera que se pueda aumentar inmediatamente el monto a $250 mil, e ir aumentando en el tiempo”.
Su par de la UDI, Cristóbal Martínez, agregó que “nosotros estamos absolutamente disponibles a sacar adelante una reforma de pensiones que le garantice a todos los chilenos, en primer lugar, que el 6% de la cotización adicional se destinará a sus cuentas individuales; y en segundo lugar, que sus fondos serán inexpropiables, inembargables y heredables”.
En materia tributaria, añadió, “vamos a empujar por medidas contra la elusión y evasión, pero no estamos dispuestos a que el Estado recaude más a costa de los chilenos, aumentándoles los impuestos”
