Close
Radio Radio Radio Radio

Políticos innovadores

Hay consenso transversal sobre la necesidad de que Ñuble cuente con un plan de atracción de inversiones, no solo por la caída del indicador a nivel nacional observada en los últimos 5 años, sino por el rezago estructural que exhibe la región, lo que se traduce en un menor crecimiento y un escaso dinamismo en la generación de empleos.

Por ello, deben valorarse las propuestas que apunten a revertir este cuadro, como las formuladas por el economista Renato Segura, quien propuso la creación de una zona franca agroindustrial en Ñuble, o la alianza que días atrás sellaron Prochile y Corfo para atraer inversión extranjera a la región.

Tales ideas han generado diferentes opiniones y niveles de adhesión, pero de lo que no hay duda -y en ello todos coinciden- es que se necesitan medidas especiales, diferentes al repertorio conocido hasta ahora para este territorio.

Se trata de algo que podría ser añadido al ideal de responsabilidad de las mujeres y hombres llamados a liderar la Región, y es la noción o actitud de la invención; la intención del atrevimiento, una mirada nueva, con más convicción en el futuro y la vida potencial que en la historia y las fórmulas ya probadas, que en el caso del desarrollo regional y la equidad territorial de Ñuble y sus 21 comunas es mejor mirar con recelo.

En efecto, hoy el eje longitudinal que constituye la zona de riego desde Ñiquén a Pemuco, incluidas las comunas de San Carlos, Chillán, Chillán Viejo y Bulnes, concentra el grueso de las inversiones del rubro frutícola y agroindustrial. Es por ello que cualquier estrategia de atracción de inversiones también debe considerar las potencialidades del secano y rubros como el turismo, la energía y la industria maderera en el Valle del Itata y en la zona cordillerana, así como apostar decididamente por profundizar y diversificar el sector de los servicios.

Las oportunidades para el desarrollo de la Región de Ñuble, a partir de nuevas inversiones, son casi ilimitadas. Borrar el “casi” estará dado precisamente por la capacidad de las diferentes autoridades -las electas y también las designadas- de innovar en su gestión y generar condiciones para captar el interés de potenciales inversionistas. Una misión ambiciosa, pero que de ser exitosa tendrá un positivo impacto en la economía y en los ingresos de sus habitantes.

La innovación es un factor que hace de la gestión política algo superior. Incluso los que desconfían de la política suelen tener dificultades para abordar este paso imprescindible, creyendo que ser eficaz es meramente hacer las cosas bien, cuando en realidad hacerlas verdaderamente bien es muchas veces dejar de avanzar por la vía acostumbrada y animarse a optar por una enteramente distinta.

Para mirar adelante, para aspirar a una región que sea capaz de revertir todos los indicadores negativos con que partió, habría que tomar en cuenta otras variables que no suelen ser consideradas en la escena política local. Sería ése un acto de lo que deberíamos llamar innovación política, una forma de darle una vuelta inesperada al predecible desenlace que han tenido las fórmulas tradicionales de crecimiento y desarrollo económico en Ñuble.

Agregar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos requeridos están marcados *

Leave a comment
scroll to top