Una positiva evaluación del “Tasting de vinos del Valle del Itata”, organizado por la Asociación Gremial de Viñateros del Valle del Itata, hizo el vicepresidente del gremio, Omar Fuentealba, quien destacó la retroalimentación que significó para los productores conocer las opiniones del jurado durante en dos jornadas de cata en la que se evaluaron 50 muestras.
El dirigente agradeció el apoyo del Gobierno Regional de Ñuble y de ProChile Ñuble para el desarrollo de las dos jornadas de degustación.
Enólogos, sommeliers, profesionales del vino y de ProChile, tanto de Chile como de los países nórdicos, de Países Bajos, de Uruguay y de Brasil, cumplieron una agenda de catas y visitas a viñas, donde conocieron los sistemas productivos locales. Así, el primer día comenzaron en la Viña Cortez, en Portezuelo, desde donde recorrieron San Nicolás, Ninhue y Quirihue; en tanto, el segundo día partieron en Ránquil, continuaron por Trehuaco y terminaron en Coelemu, específicamente en Guarilihue.
Fuentealba hizo hincapié en la retroalimentación que lograron los productores al escuchar las opiniones de los profesionales. “El objetivo era precisamente obtener una evaluación de lo que estamos produciendo, siempre con la mirada a dónde tenemos que mejorar (…) para que estos vinos, finalmente, tengan la calidad suficiente que nos represente como zona, como ecosistema y que sean de buena aceptación en el mercado”.
Cristian Pavez, ejecutivo de ProChile Ñuble, enfatizó que el objetivo es llegar a segmentos de consumidores específicos que valoran estos vinos. “Siempre se ha visto que el vino chileno tiene alta competitividad afuera, lamentablemente, los más pequeños estaban quedando relegados y ellos también tienen una posibilidad en el exterior. No se trata de llegar a los supermercados, lo que estamos hablando acá es que hay gente que representa un consumo especializado, que está buscando vinos distintos a lo que se presenta generalmente de Chile y esto es lo que ofrece el Valle del Itata, producciones pequeñas, hechas con pasión”, manifestó.
Precisamente, el destacado enólogo, Philippo Pszczólkowski, planteó que “el Itata es un potencial, un cofre lleno de joyas. Hay que creerse el cuento. Aquí se dio una viticultura muy tradicional. Los productores del Itata, hay que reconocerles que han sido quienes han mantenido todo el patrimonio vitícola de Chile con esfuerzo, casi no entendidos por el resto de la sociedad, que, a veces, abusa en lugar de reconocer lo que el Itata ha dado”, aseveró.
En ese contexto, Catalin Butnariu, representante comercial de ProChile en los países nórdicos, afirmó que “el Valle del Itata se está convirtiendo en una marca en los países nórdicos de manera no oficial, porque, por un lado, uno habla de vinos chilenos de manera general, y por otro, existen también los vinos del Valle del Itata. También en los monopolios nórdicos se están publicando cada vez más licitaciones con denominación Valle del Itata, hay mucho conocimiento gracias al trabajo previo que se ha hecho para promover estos vinos. El desafío es seguir con este trabajo de promoción de la región; en general, por la cultura europea, la promoción regional le agrega valor al producto. Nadie promueve hoy en día vinos de Francia, todos promuevan vinos de regiones de Francia, de Bordeaux, de Provence, etc.; lo mismo pasa con Italia. Entonces, yo creo que Chile ha llegado a este nivel de madurez en el tema de promoción de vinos”.
