Sandra Acuña, presidenta de la junta vecinal Valenzuela Wicker, dice que en las inmediaciones de la esquina de las calles Covadonga con O’Brien, “son tantos los locales de venta 
de alcohol, que mucha gente se viene a tomar acá”.
Aclara que el lugar favorece ese ilícito porque “hay iluminación muy baja, entonces es todo oscuro; el lugar está descuidado y a veces se presta para que se generen microbasurales”, describiendo de esa manera casi la totalidad de los problemas que se repiten en este tipo de sectores.
Ese punto, precisamente, es uno de los 12 que fueron identificados por Carabineros como “riesgosos” y por lo tanto, afectos a ser intervenidos por el nuevo Plan Calles Sin Violencia, que desde mayo de este año entró en vigencia en cerca de 45 comunas del país, entre ellas Chillán.
El plan, que importa recursos por $500 millones para programas ligados a la seguridad pública, requiere que la Municipalidad se involucre para designar -en el caso de la capital regional de Ñuble- 10 de esos 12 lugares que debe ser intervenidos.
Principalmente se ha hecho referencia a puntos que están dentro de los cuadrantes 1, 3, 6, 7 y el sector de Chillán Oriente en el sector de la subcomisaría Huambalí.
Las visitas de la Dirección Municipal de Seguridad comenzaron hoy viernes, partiendo precisamente por esa esquina.
“Nosotros hace como un año que estábamos conversando con la gente de la municipalidad porque lo que queremos es un lugar limpio, iluminado y que sirva de paseo para los adultos mayores del sector”, comentó la dirigente.
Desde Seguridad Municipal explicaron que “ya estamos trabajando junto a ellos para poder recuperar el espacio de Covadonga con O´Brien, porque es una necesidad muy sentida por la comunidad y sus vecinos, así es que tuvimos ayer nuestra primera reunión de coordinación, para ver cómo y de qué manera recuperarla, escuchando las opiniones y entender qué es lo que ellos quisieran que se desarrollara en ese lugar”, comentó su directora Alejandra Martínez.
En esa esquina incluso hubo hace un par de semanas atrás un homicidio, “por lo que sin dudas es uno de los puntos importantes que se deben recuperar, porque precisamente allí suceden este tipo de situaciones”, comentó el concejal Rodrigo Ramírez, quien junto al edil, Rodrigo Valdebenito, formaron la comisión de visitas a estos primeros puntos a intervenir.
El municipio tiene como plazo hasta el 25 de agosto para poder ingresar estos proyectos a la cartera.
“Así como lo hicimos en esta ocasión vamos a ir visitando otros lugares, ya nos reunimos con nuestros equipos y con la Dideco para poder recoger las diferentes necesidades que los vecinos les hayan manifestado y así cuadrar en esta ecuación los Bienes Nacionales de Uso Público versus el factor de riesgo existentes en las calles identificadas por este plan”, añadió Alejandra Martínez.
Acciones comunitarias
Para la presidenta de la Comisión Seguridad del Concejo Municipal de Chillán, Quenne Aitken, no bastaría solo recuperar espacios para implementar algo, o poner luces y cámaras, para generar el efecto deseado, sino también observa que es necesario que se promueva la utilización de esos lugares para que no sigan siendo usados para consumir alcohol o drogas
“Por ejemplo, si hoy tomamos uno de esos lugares y solo ponemos árboles y bancas, pro no son ocupados por la comunidad, lo único que va a pasar es que las personas que consumen alcohol o van a delinquir, se van a quedar con un lugar más bonito para seguir haciendo lo mismo de siempre, por lo tanto, lo que esperamos es que se comprometan los apoyos para que se genere una acción comunitaria”.
Añade que este plan Calles Sin Violencia, “viene diferido con el Programa Barrio que incluye este componente comunitario que incorpora monitores y gestores de actividades para los vecinos y este puede ser el componente que puede postular el municipio mediante la postulación de fondos o el FNDR o subvenciones extraordinarias”.
Respecto a los lugares a visitar, estos serán presentados de manera oficial al Concejo Municipal la próxima semana para una última deliberación.
