La ministra de Bienes Nacionales, Javiera Toro, se encuentra de visita en las regiones afectadas por las graves inundaciones que dejó el paso del sistema frontal de hace tres semanas, y que dejó damnificadas a más 1.000 familias en Ñuble. La autoridad se convirtió en la nueva encargada de la reconstrucción, por lo que su labor se va a concentrar en la coordinación y ayudas tempranas, además de establecer un plan de reconstrucción definitiva para los próximos meses.
Este nombramiento viene en línea del trabajo que aún sigue realizando Paulina Saball, quien es la delegada en cuanto a las catástrofes de los incendios del verano pasado, por lo que se prevé que la ministra lo sea hasta que la situación lo amerite.
En conversación exclusiva con Radio La Discusión, la autoridad explicó que las coordinaciones serán clave para el proceso reconstructivo, en cuanto a medidas como la entrega de la vivienda de emergencia o el trabajo mancomunado con las municipalidades.
En ese sentido detalló que “los municipios son fundamentales en esta primera respuesta, ya que son quienes deben levantar las primeras consecuencias, demandas y necesidades a Senapred para que se puedan ir canalizando. Entre ellas, las limpiezas de caminos, de cauces y la necesidad de viviendas de emergencia. Los municipios conocen su territorio, tienen relación con las comunidades y también nos han ido levantando cuales son las principales necesidades”. La ministra comentó que las reuniones con los alcaldes será fundamental para ir conociendo cuales son los requerimientos de estas comunas.
Vivienda de emergencia
Por otro lado, la autoridad se refirió a la construcción de las viviendas de emergencia, teniendo en cuenta el lugar donde van a ser construidas. “Para las personas es muy necesario poder contar con un techo especialmente durante este invierno, pero también debemos hacernos cargos de que es un proceso, que en estas condiciones climáticas y de terreno tiene ciertas complejidades, porque no podemos instalar viviendas de emergencia allí donde existen riesgo de nuevas inundaciones. La reconstrucción a largo plazo tiene que tener en consideración esos factores”.
Planificación territorial
El problema del ordenamiento territorial sigue pesando, esta vez para la catástrofe de las inundaciones. La principal queja de los alcaldes en los incendios de febrero, fue esa. Muchas viviendas estaban demasiado cerca de los predios forestales y no existía regulación alguna, algo que condicionó que muchas personas perdieran su vivienda por completo debido al avance de las llamas.
Ahora, teniendo de experiencia la emergencia pasada, esperan que frente a los futuros escenarios de incendios o inundaciones, esta planificación territorial si se pueda establecer y evitar grandes catástrofes y pérdidas, tanto humanas como de infraestructura. Al respecto, la ministra Javiera Toro explicó que la planificación territorial, de aquí en más, debe ser clarificadora para identificar las zonas de mayor riesgo ante estas catástrofes, mediante, por ejemplo, planes reguladores municipales.
“Esta planificación es fundamental para poder determinar los distintos usos del suelo, en qué sectores es viable o responsable instalar viviendas u otras actividades. Hoy día tenemos los planes reguladores comunales que señalan las zonas donde existen inundaciones, pero tenemos un desafío como país muy importante, como la dictación de los planes regionales de ordenamiento territorial, ya que van a depender de los gobiernos regionales y van a poder tener esta mirada más global e integral del territorio”. Este reglamento está en toma de razón en la Contraloría y una vez que salga y se publique, es muy importante que los gobiernos regionales trabajen en esto”
