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La poderosa razón por la que ñublensina ofrece recompensa para recuperar su computador robado

Un llamado desesperado realiza una madre ñublensina tras sufrir el robo de su notebook en la calle Florindo Lagos, donde dejó estacionada su camioneta para visitar a una clienta.

Desde el vehículo marca Mazda de Jenny Núñez Orellana, quien es dueña de fábrica de muebles, un delincuente es captado por una cámara de seguridad de la Escuela José María Caro,  cuando quiebra el vidrio del lado izquierdo para sustraer un bolso con el equipo, por el que hoy ofrece una recompensa.

“Hemos tratado de realizar alguna gestiones,  pero en realidad igual está difícil, me conseguí las grabaciones de la escuela que están ahí. Hoy voy a bajar el programa para poder revisar. Tenía mucho cuidado con mi computador por lo mismo. Fue un ratito que me junté con una clienta para tomar una medidas. Fue una cosa de minutos, me rompieron el vidrio, de hecho tenía la billetera ahí. Como mi camioneta es alta no se ve a simple vista, el tipo se acercó a mirar y le llamó la atención el computador, porque había más cosas”, explicó.

Más allá del valor material del equipo marca Lenovo, lo que interesa a la familia es recuperar el valioso material que contenía, es decir las fotografías y videos que recuerdan a su hija Rafaella Candia, quien falleció de un año y tres meses.

Su caso fue conocido en Chillán, ya que la menor tuvo que enfrentar diversas hospitalizaciones a tan corta edad por una dura enfermedad. El 13 de noviembre recién pasado Rafaella habría cumplido cinco años.

Tras su fallecimiento sus padres donaron 10 sillones al servicio de Pediatría del hospital Herminda Martín, específicamente, para los padres que pasan largos periodos acompañando a sus hijos.

La madre ofreció una recompensa a quiénes ayuden a recuperar el equipo.

“El computador era relativamente nuevo, del anterior había sacado todo, que lo guardé en un disco duro  que también lo tenía en el bolso. Lo que más me duele es el respaldo de los vídeos y las fotos, porque son los registros de mi segunda hija,  que falleció de un año y tres meses. Fue una etapa súper dolorosa, ella tenía una malformación en el esófago y obviamente teníamos todos los recuerdos ahí. Los únicos que voy a recuperar son aquellos que le envié a mi familia”, sostuvo.

 

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