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“La industria chilena del arándano está en la UTI”

Mejorar la calidad y ser más eficientes asoman como dos elementos clave para superar la crisis de los arándanos, manifestó Mauro Magnasco, gerente general de El Torreón Export, productora y exportadora de frutas, de San Carlos.

La reciente temporada de arándanos arrojó números rojos nuevamente para los productores chilenos, quienes enfrentan una competencia cada vez más fuerte de otros países, como Perú. De hecho, no son pocos los que ya comenzaron a arrancar sus plantas.

Según planteó Magnasco en Radio La Discusión, “hemos visto un declive sostenido en el precio año a año, lo cual nos tiene a todos contra las cuerdas y hoy día yo creo que están sobreviviendo los que son más eficientes internamente, los que pueden producir con costos razonables y, por otro lado, los que están un poco más integrados, como nosotros, pero hoy en día hay muchos productores chicos y medianos que solo cosechando y entregando sus frutas no están pagando la cuenta”.

Explicó que “cuando hay una especie que pasa por una época dorada, como el arándano hace 15 años, por lo general, entra mucha gente en la industria y la torta se empieza a repartir y se meten otros países, como en este caso, Perú, y el mercado se empieza a estancar o se empieza a abastecer la demanda, y hoy te das cuenta que estamos reduciéndonos como industria nacional”.

Recambio varietal

Magnasco expuso que, “uno de los desafíos es mantener y subir la calidad y eso es complicado cuando al mismo tiempo tratas de bajar costos, sobre todo, en un contexto con una inflación como la que tenemos, con un dólar que ya no está a mil pesos y después de tres años que nos han acribillado por todas partes. El año pasado el tema de los fletes fue un desastre, creo que hubo muchos productores que quebraron. Lo que hoy día se escucha mucho en la industria y que es casi un poco cliché, el famoso recambio varietal”.

Respecto a la introducción de nuevas variedades, comentó que, “la industria peruana, como entró tan tarde, la mayoría de sus campos están con genéticas más modernas, por lo tanto, la planta da mejor rendimiento, mayor calibre y da más firmeza. Y claro, hoy Chile se ve enfrentado a esta realidad de que, o se moderniza el promedio de la planta o nos vamos a quedar atrás, y de hecho, esta temporada, por primera vez en la historia el arándano peruano se empieza a vender un poco más caro en los mercados internacionales, lo cual es muy preocupante, porque significa que el chileno se está percibiendo como un arándano de peor calidad”.

Reconoció, sin embargo, que no ha tomado una decisión para su huerto. “En estos momentos estoy en una posición de observación, viendo qué pasa. Creo que es lo más responsable. Hay mucha gente que se desesperó y que arrancó las plantas y se salió del juego. Yo estoy aguantando el chaparrón para ver qué queda en pie y después, en función de eso, tomar una decisión. La verdad es que estamos en la UTI, la industria está en la UTI y yo creo que si se achica un poco la oferta chilena puede ser que el precio se restablezca. No creo que suba y se vuelva maravilloso, pero puede ser que volvamos a tener un negocio relativamente rentable si hay menos competencia”.

Consultado si ha evaluado arrancar plantas, sostuvo que “hay variedades que sí están en la cuerda floja, la Brigitta y Ochlockonee fundamentalmente, porque son variedades que la vida de poscosecha es más corta. En general, los clientes no las quieren mucho”.

Afirmó que existe una oportunidad para variedades de cosecha más tardía.

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