Múltiples han sido las reuniones y gestiones que ha impulsado la Junta de Vigilancia del Río Ñuble con el fin de normalizar el funcionamiento de su red de canales, luego de la destrucción que dejaron dos crecidas del río a fines de junio y en agosto pasados.
La semana recién pasada se reunieron, en Santiago, con el Subsecretario de Obras Públicas, José Herrera, y en otra oportunidad con el secretario ejecutivo de la Comisión Nacional de Riego (CNR), Wilson Ureta, con la intención de acelerar la materialización de los trabajos de encauzamiento en el río Ñuble -los que hasta hoy siguen en compás de espera- y la llegada de recursos de un concurso de emergencia. Ambas reuniones fueron gestionadas por parlamentarios de la región, específicamente, la diputada Marta Bravo y el senador Gustavo Sanhueza.
A estas gestiones se suman reuniones sostenidas la semana pasada en Ñuble con los seremis de Obras Públicas y Agricultura y directores de servicios dependientes como la CNR, Indap, DOH y DGA, para informarse del estado de avance de los trabajos en la zona. Anteriormente, la Junta de Vigilancia logró exponer la complicada situación de los regantes ante la Comisión de Agricultura de la Cámara de Diputados, además de reunir a cinco de los siete parlamentarios de la región, para entregarles información sobre el estado de los canales tras la emergencia.
“Hemos desplegado todo nuestro recurso humano en estas emergencias, en primer lugar, cuando sucedieron las crecidas del río, en terreno, e informando a nuestros canalistas, y posteriormente gestionando reuniones para dar a conocer la grave situación en que quedaron nuestros canales, que en un 100% sufrió algún grado de afectación, e intentando acelerar la llegada de recursos y los trabajos en el río y el despeje de los canales. Hemos contado con el apoyo de casi todos los parlamentarios de Ñuble, porque es evidente que si no logramos tener todo normalizado para el inicio de la temporada de riego, en un par de semanas, vamos a sufrir las consecuencias de que nuestros agricultores no puedan regar sus siembras; un impacto serio en todas las etapas de la cadena productiva, incluyendo el empleo”.
Trabajo conjunto
Las múltiples reuniones sostenidas por los regantes han servido para exponer la compleja situación a las autoridades nacionales, con el único objetivo de agilizar obras y recursos en beneficio de los canalistas.
El secretario ejecutivo de la CNR, tras la reunión sostenida el miércoles pasado explicó que “profundizamos acerca de las diversas problemáticas que han enfrentado los regantes de Ñuble después de las inundaciones de junio y agosto. Pudimos establecer algunos acuerdos para abordar en primera instancia el concurso de emergencia, que es lo más contingente, y posteriormente también dar certeza y claridad de las posibilidades que tendrán en la siguiente etapa de reconstrucción de las obras de riego”.
Como expuso Rueda, la colaboración de los parlamentarios ha resultado vital, en cuanto han logrado conseguir las instancias para que los regantes sean escuchados.
“Estamos relevando la urgencia que tiene el reencauzamiento del Río Ñuble y otros de la región, para estar en condiciones de enfrentar el inicio de la temporada de riego. Dada esta urgencia, si no se consigue terminar esos trabajos, vamos a generar una crisis en la agricultura local, porque no contaríamos con el riego, principalmente, para nuestros pequeños agricultores (…) Existen los recursos, por lo tanto, lo que hay que acelerar son los procesos internos”, expuso el senador Gustavo Sanhueza tras la cita con el MOP.
“En la reunión con el secretario ejecutivo de CNR pudimos exponer a nivel central, la situación catastrófica de nuestra agricultura si no encontramos soluciones urgentes. Nos quedamos con la sensación de la disposición a trabajar en pos de que nuestra región no se vea perjudicada en su principal actividad que, además, es significativo no solo para Ñuble sino para todo el país”, sostuvo la diputada Marta Bravo.
Por su parte, la diputada Sara Concha, tras participar en la reunión con la CNR aseguró: “espero que las palabras, en esta oportunidad, no ser las lleve el viento y que aquellos compromisos que se adquirieron en la reunión que sostuvimos con la Comisión Nacional del Riego puedan realmente ser eficaces y eficientes, sobre todo en los términos de tiempo que tenemos en contra, para poner en marcha la temporada de riego y no dejar sin su trabajo a los pequeños agricultores”.
