El Programa de Reparación y Atención Integral en Salud y Derechos Humanos (PRAIS) del SSÑ responde al compromiso asumido por el Estado con las víctimas de las violaciones a los Derechos Humanos, ocurridas entre septiembre de 1973 y marzo de 1990, y que desde el año 2005 es implementado en Ñuble.
Un dispositivo que ha permitido avanzar en el proceso de reparación integral y reconocimiento de un hecho que dejó huellas imborrables en numerosas familias y generaciones. En este camino, se ha trabajado de manera colaborativa con los usuarios, quienes fueron destacados por su dedicación y esfuerzo.
“Nos reunimos con las y los usuarios PRAIS, uno de nuestros programas cuyo objetivo es reparar aquellas consecuencias físicas, emocionales y también de salud mental producto de lo que fue el Golpe de Estado. Queremos reconocer en ellos distintas habilidades y cualidades que los han llevado a formar parte de este dispositivo e ir relevando y conservando los valores que para ellos son tan importantes, como la búsqueda de verdad y justicia, además de la reparación integral”, destacó la Directora del SSÑ, Elizabeth Abarca Triviño.
La directiva además precisó que, “para nosotros como Dirección de Servicios de Salud Ñuble, estamos comprometidos en llevar salud a todas las personas y grupos, es muy importante relevar esta instancia, donde queremos además reconocer a los funcionarios y funcionarias que laboran en aquel dispositivo, contribuyendo en mejorar la salud física, mental y emocional de todas estas personas que sin lugar a dudas han sido marcadas por la historia de nuestro país”.
En este programa, cerca de 27 mil personas de Ñuble están inscritas, de las cuales, alrededor de 600 participan anualmente de los diversos procesos de atención.
Reconocimiento y reparación
Teresa Retamal Silva, Presidenta de la Agrupación ONG Renacer PRAIS y también galardonada, entregó un significativo mensaje, indicando que, “este día es de suma importancia, porque por primera vez, en 50 años, la Red de Salud nos brinda un reconocimiento. Esto tiene un gran valor en términos de reparación moral y social, tanto para nuestros familiares como para nosotros, los sobrevivientes de Derechos Humanos”.
Asimismo añadió que, “lo más relevante que tiene este programa de reparación integral es la salud mental, entendiendo que nosotros somos sobrevivientes, porque fuimos presos políticos, pero también fuimos torturados, lo que nos ha dejado muchas secuelas que, a nuestra edad y habiendo transcurrido 50 años, aún pesan”.
Además de la Sra. Teresa, fueron reconocidos por su labor: Raquel Valdez Villablanca, María Elena Baeza Figueroa, Sergio Hernández Carrión, María Irene Valenzuela Arroyo, Aida Retamal Silva, Pedro Guerrero Valdés, Luis Benito Bustos Seals, Víctor Yáñez Campos y Héctor Vidal Salinas.