El Comité pro Defensa de la Fauna y Flora (Codeff) reportó la destrucción de los corrales que resguardaban a las crías de lobos marinos en Cobquecura, lo que terminó con seis especies muertas.
Los delitos ocurrieron durante la noche del miércoles y jueves de esta semana. En ese lugar, las crías se encontraban protegidas hasta que la marea bajara para retornar al islote con sus familias.
“Es un hecho lamentable y estamos muy lastimados. El corral fue cruzado y desarmado por desconocidos, esto provocó que los lobos escaparan durante la noche y fueran atacados por perros y después por jotes”, informó Luciano Pérez, Director y Coordinador Nacional de Codeff.
Desde la organización aseguraron que esta es una situación inusual, ya que la ONG lleva más de treinta años trabajando en esta zona de la Región de Ñuble y en todo ese tiempo esta situación se había repetido poco. “Antes era más habitual en las temporadas de caza y fabricación de aceite de lobo ilegal, pero ahora no había pasado por eso nos sorprende”, señaló Pérez.
Sobre las motivaciones de este hecho desde Codeff plantean dos hipótesis, “alguien pensó que al liberarlos hacía algún bien, sin saber que los lobos quedarían expuestos al ataque de perros y jotes o fue alguien que no estaba en sus cabales y los quiso soltar porque sí”, aunque aclaran que es difícil saber si la motivación es la misma para los dos días o serían personas distintas.
También informaron que se harán turnos de 24 horas, junto a los otros miembros del Comité de Gestión del Santuario de la Naturaleza Islote Lobería e Iglesia de Piedra, para mantener el sector vigilado.
Llamado a denunciar
A principios de semana, el municipio, con los maestros de la dirección de obras habían construido un corral de madera en el cual quedan os lobitos que varan en las playas de la comuna, donde son alimentados y cuidados para luego intentar retornarlos a la roca de La Lobería.
Constanza Núñez, voluntaria de Codeff, quien se encuentra trabajando en la zona en el cuidado de los lobitos, visiblemente afectada relató que “cuando me avisaron me vine al tiro a La lobería y me encontré con que habían sacado las tablas, o sea, ni siquiera abrieron la puerta, sino que destrozaron unas tablas, para que salieran los lobitos y los jotes estaban comiéndoselos. Es una situación muy lamentable, porque estábamos cuidando a los lobitos. Ellos estaban sanos ayer, y teníamos previsto que hoy íbamos a hacer la operación retorno de ellos a la roca. Ahora el panorama es desolador, de verlos así, por culpa de personas irresponsables y crueles, que la verdad lamento mucho”, aseveró.
El alcalde de Cobquecura Julio Fuentes afirmó que “junto con condenar y lamentar estos hechos, que atentan contra uno de los símbolos protegidos de nuestra comuna, buscaremos la forma de aumentar la protección de esta especie protegida, llamando a la comunidad a denunciar la ocurrencia de estos atentados a la fauna marina de la comuna”.
Texto: Ignacia Oyarce