La Municipalidad de Quillón, junto a la profesionales de la Dirección General de Aguas (DGA), realizaron inspecciones en distintos sectores ribereños de la Laguna de Avendaño en Quillón, en 40 puntos de extracción donde se están realizando captaciones mecánicas de agua, de los cuales dos fueron infraccionados por mal uso del recurso hídrico.
El encargado de Medio Ambiente de la Municipalidad de Quillón, Ávaro Mendoza, afirmó que “la baja (de la laguna) ha sido un tema que se ha puesto en la mesa desde el mundo político hasta los mismos vecinos que manifiestan su preocupación por el bajo nivel de la laguna. Como municipalidad hemos hecho un diagnóstico de algunas actividades que van en desmedro de la laguna, una de ellas es la extracción mecanizada, que es usada para hacer regadío en áreas verdes y llenar piscinas, que no van con concordancia con un consumo humano o un consumo en base a necesidades”.
“Y eso es lo primero que se está trabajando, eliminado esto se espera que se empiece a hacer un uso racional y regularizado de toda extracción de agua, y esto no es solo desde la municipalidad sino que también la DGA, que nos está apoyando fuertemente a detener estas extracciones mecánicas, las cuales solo hacen disminuir el volumen acumulado de la laguna, considerando la bajas precipitaciones que se vivió este invierno. El proceso de estiaje es un proceso natural en la cual todos los cuerpos de agua tienen a la baja en estos meses”, aseguró el funcionario municipal.
En la jornada se multaron a dos personas por este uso irregular en sus procedimientos de explotación y se estima que durante los próximos días seguirán visitando los diversos puntos para supervigilar los trabajos que se están realizando en el lecho de la Laguna Avendaño. Esto debido a que por ordenanza municipal no está permitido la extracción del recurso, a menos que se requiera para emergencias en casos de siniestros al Cuerpo de Bomberos, Brigadas de Corporación Nacional Forestal y Empresas Forestales.
“Robo hormiga”
El presidente de Quillón Verde, Ignacio Lagos, se refirió al daño que le hace a la laguna este uso irregular. “Las napas van a bajar mucho el caudal y al sacar agua de la laguna también acelera esta sequía que viene y baja de nivel. Yo le llamo robo hormiga, porque la gente dice, ¿qué daño le voy a hacer yo a la laguna si solo saco para regar el pasto o para el estanque del baño? Pero si calculamos que cada casa al día esté sacando dos mil litros de agua, hasta ahora están reconocidos 40 puntos de extracción, tenemos una cantidad por día enorme, y eso lo tenemos que multiplicar por la semana y el mes. Entonces cada persona que esté sacando al sumarse con los otros vecinos se le está haciendo un daño considerable a la laguna”.
Agrega que “todos los años a la laguna se le inyectaba agua artificialmente por un canal de regadío, este año se está estudiando para ver cual es el proceso natural de la Laguna de Avendaño y ver que los blumes algares (proliferación de microalgas) no vuelvan a ocurrir. Porque cada vez que daban el agua del canal al paso de una semana o menos la laguna se torna verde, y esto es porque el agua viene contaminada, pero no necesariamente con químicos, sino que exceso de nutrientes, y con el PH muy alto, y esto le afecta a la laguna”, indicó el medioambientalista de Quillón Verde.
Además, añadió que dentro de los puntos identificados de extracción mecanizada por la fundación estos llegan a sesenta, por lo que esta información reunida será entregada al municipio para que puedan continuar con las fiscalizaciones.
Visión de la comunidad
En el caso de una de los sectores que son cercanos a la ribera de la Laguna de Avendaño, la presidenta de la Junta de Vecinos de la Villa Tennessee, Carolina Saldías Lara, afirmó que “este año ha bajado más que años anteriores, se nota mucho. Supuestamente lo que han dicho que llega al canal y este caudal lo taparon, pero nosotros sabemos que están sacando agua y por siempre por Chillancito, por dentro han tenido para regar los prados”.
Exequiel Gaete, presidente de la Junta de Vecinos La Porteña-Alessandri que es ribereña, comentó “que es un proceso natural, estamos en un cambio climático, lo mismo que pasa con los caudales de los ríos. El año pasado era el mismo tema en estas mismas fechas”. Sin embargo, apuntó a otro tema que le preocupa más, ya que “la laguna se está contaminando con las fecas de las fosas sépticas que tenemos la gente que ribereña la laguna. Esto porque no tenemos alcantarillado”.
En la Villa Tennessee existen un poco más de 42 casas y en La Porteña-Alessandri hay registrados cerca de 180 personas, siendo la situación del alcantarillado constante en otros sectores, ya que la mayoría utiliza fosas sépticas.
Estudios
Desde septiembre y durante octubre, desde la municipalidad debido a la preocupación que produce el estado medioambiental de la Laguna Avendaño, es que se están realizando estudios por parte de la Universidad del Bío-Bío a la misma para ahondar más en el tema.
Álvaro Mendoza recalcó: “queremos ser realistas, en la laguna tenemos una sinergia de acciones humanas que si están impactándola, de ahí nace la preocupación que todo el consolidado de estudios que se está haciendo, basado en la eutrofización (exceso de nutrientes) que está sufriendo la laguna, el borde que se está disminuyendo de a poco y la gran cantidad de solicitudes de la comunidad”,
Y agregó que “claramente los esfuerzos van a mejorar la condición de nuestra laguna y remediar un poco la eutrofización, que es un proceso natural que todo cuerpo tiene, lo que nosotros en este momento como administración tenemos que hacer es regular y que este proceso sea lo más lento posible, que la cantidad de nutrientes sean lo que están en juego dentro de la laguna y no sean inyectados desde afuera”.
Los esfuerzos del municipio están enfocados en regular a todos quienes interactúan con la laguna y su entorno, para que tenga el menor impacto, a lo que se agrega el esfuerzo de declararlo humedal urbano este 7 de diciembre.
