En una declaración emitida este martes, Bomberos de Chile expresó su preocupación acerca de varios temas que amenazan el presupuesto y el funcionamiento de la institución, destacando que han llegado a un punto de agotamiento en el que sienten que no están siendo escuchados como se merecen.
El presidente nacional de Bomberos de Chile, Juan Carlos Field, detalló cuatro cuestiones críticas que están afectando a la organización.
Según planteó, la institución está luchando contra una reducción presupuestaria de $3 mil millones, que pone en riesgo su capacidad para operar de manera efectiva. Esto incluye un déficit significativo en la parte de operaciones, que es uno de los mayores desafíos financieros a los que se enfrentan.
“Tenemos un problema no menor, porque no llegamos a un acuerdo con el Gobierno de Chile en poder mantener nuestro presupuesto 2023, que fueron $57 mil millones, en diferentes glosas, entre ellas la parte de operaciones, que es el déficit mayor de Bomberos de Chile“, detalló.
También apuntó a la Circular 20 del Ministerio de Hacienda está generando problemas adicionales. Esta circular exige que las transferencias de fondos al sector privado estén respaldadas por una boleta de garantía u otro instrumento de rápido cobro, lo que representa un desafío particular para Bomberos. Aunque se había anticipado que esta medida no afectaría a la institución, “la Dirección de Presupuestos de Chile (Dipres) ha comunicado que Bomberos también debe cumplir con esta exigencia, lo que es insostenible debido a la falta de recursos”.
De acuerdo a lo señalado, la institución enfrenta deudas pendientes relacionadas con las rendiciones del Fondo de Emergencia (Femer) debido a su participación en la respuesta a incendios forestales. Esta deuda ha aumentado y sigue siendo un problema no resuelto.
La institución también arrastra una deuda significativa de $1.300 mil millones relacionada con la reconstrucción de cuarteles después del terremoto de 2010.
En un tono enérgico, la institución advierte que si el Gobierno no responde a estas preocupaciones, convocarán a un “toque de sirena” en todos los cuarteles en los próximos días como medida de protesta.
“Somos una institución con más de 170 años de historia, que siempre ha cumplido sus compromisos. Hoy se nos está tratando como cualquier institución nacida hace un par de meses“, concluyó duramente Field.
