Este martes, a partir de las 9 horas, la sala del Senado comenzará a ver la acusación constitucional en contra del Presidente Sebastián Piñera, la cual fue aprobada la semana pasada por la Cámara de Diputados.
En primer término, se escuchará la relación que efectuará el secretario general de la Cámara Alta. Seguidamente, se oirá a los miembros de la comisión designada por la Cámara para formalizar la acusación, conformada por los diputados Gael Yeomans (CS), Leonardo Soto (PS) y Gabriel Silber (DC).
A continuación, se escuchará a la defensa del acusado.
Luego, los diputados acusadores podrán realizar la réplica y, posteriormente, la defensa podrá hacer su dúplica, instancias que se extenderán hasta las 13.30 horas.
Por la tarde, a partir de las 15 horas y hasta total despacho, los senadores podrán fundamentar su voto respecto de los dos capítulos del libelo acusatorio, hasta por quince minutos en total. Terminados dichos fundamentos, se pondrá en votación separada cada uno de los capítulos de la acusación: el primero por vulneración al “principio de probidad y el derecho a vivir en un medio libre de contaminación”, y el segundo por haber “comprometido gravemente el honor de la nación”. Todo esto, en el marco de la venta de la minera Dominga por parte del Presidente Piñera a Carlos Alberto Délano.
Efectos electorales
Si bien los senadores no pueden pronunciarse sobre el fondo del asunto, pues actuarán hoy como jurado, a nivel local, la senadora Loreto Carvajal, del PPD, se manifestó a favor de la presentación de la acusación en su momento, y ha sido sumamente crítica respecto del actuar del Presidente Piñera en relación la venta de la minera Dominga.
En tanto, el representante de la UDI, Claudio Alvarado, se refirió al momento político “extemporáneo” en que se presentó la acusación constitucional.
“Llama la atención la época en la que se presenta esta segunda acusación en contra del Presidente, un mes antes de las elecciones. Además, ésta se refiere a situaciones que ya fueron investigadas por el Ministerio Público en 2017 y fueron juzgadas y definidas por los tribunales competentes. Se declaró la inocencia del Presidente respecto de los hechos imputados. Da la impresión que se tiene a forzar una ‘unidad’ de la oposición en torno a una acusación constitucional cuyo mérito es bastante dudoso, y cuyas causales no guardan relación con la Constitución”, sostuvo el senador de la UDI.
Agregó que “lo que es materia de investigación no puede ser juzgado por otra institución, en este caso, el congreso. ¿Qué pasaría si el congreso llegase a aprobar la acusación en el Senado, destituyera al Presidente de la República, y éste posteriormente fuera absuelto por los tribunales de justicia? Sería totalmente arbitrario, injusto, y una muestra más que se actúa políticamente, más que jurídicamente. Espero que mañana (hoy) se actúe con altura de mira y que los senadores, que actuamos como jurados, valoremos los hechos que están ahí descritos y emitamos una opinión en conciencia”, aseveró.
En términos generales, para los libelos acusatorios la Cámara de Diputados toma el rol de acusador, y el Senado el de jurado.
De esta forma, luego que la Cámara Baja aprobara la acusación por 78 votos a favor, la Cámara Alta deberá ratificarla o desecharla, para lo cual necesita de los 2/3 de los legisladores, es decir, 29 senadores, quórum que no se estaría alcanzando, según estimaciones realizadas por la misma oposición.
Tampoco se sabe si esta última votará en bloque, o habrá algún(a) “descolgado(a).
