El jueves 12 de marzo, autoridades confirmaron el primer caso oficial de contagio de Covid-19 en la región de Ñuble.
“Es el primer caso de Ñuble y el número 24 en el país. Es una persona que viajó al extranjero, a Perú, es un hombre joven que está, según el protocolo, siendo tratado dentro de lo que se puede en esta enfermedad”, dijo en la oportunidad a radio La Discusión, el intendente Martín Arrau, aludiendo al caso de un paciente de 29 años que por entonces se encontraba en su domicilio cumpliendo la cuarentena y con reposo.
Por su parte, la seremi de Salud, Marta Bravo, agregó el día señalado que el hombre arribó a Chille el 8 de marzo. “El día 9 presentó sintomatología, principalmente tos, fiebre, odinofagia, cefalea. Consultó en la clínica el día uno, se activa el protocolo por el antecedente de viaje al extranjero y ese mismo día nos da el resultado del examen que nos confirma el caso”.
Dos después, el fin de semana del 14 de marzo, salió a la luz el brote epidemiológico en un gimnasio de calle Schleyer esquina Palermo, lo que derivó en la oficialización de al menos 14 contagios, gatillando el 23 de marzo el inicio de un cordón sanitario y el 30 de marzo, una cuarentena que se extendió tres semanas, medidas que pudieron mantener a raya los contagios hasta hoy.
Más de tres meses después de ese primer caso oficial, se confirma sin embargo, que en realidad un primer caso en Ñuble se constató en el mes de febrero, antes del primer caso oficial y que el Gobierno decretara Estado de Excepción Constitucional de Catástrofe en todo el territorio nacional (18 de marzo).
Así lo establece un informe del Ministerio de Ciencia, publicado por el diario El Mercurio, sobre la base de datos del Ministerio de Salud, que estableció la existencia de 33 personas que ya estaban contagiadas en febrero, todas con inicio de síntomas, antes del que ha sido considerado el caso cero, correspondiente a un médico talquino que pasó sus vacaciones en el sudeste asiático, caso oficializado el 3 de marzo.
En el documento se detalla que estos primeros infectados se distribuyeron en 28 comunas, entre ellas Chillán.
“Claramente la llegada del virus fue al menos en febrero, posiblemente por personas jóvenes que viajaron de vacaciones a Europa y que probablemente no tuvieron síntomas o muy pocos consultaron”, explicó el medio capitalino la infectóloga Jeannette Dabanch.
Una de las razones de no haber constatado el sistema que el diagnóstico de aquellos casos era de Covid-19, pudo haber sido, según la profesional, que en aquellos días se estableció que uno de los síntomas era presentar fiebre, “entonces muchos pudieron haber pasado”, afirmó.
El informe revelado ayer por El Mercurio viene a confirmar que uno de los casos presentaba residencia en Chillán. Anteriormente, el 2 de mayo, La Tercera publicó que un registro del informe epidemiológico del Minsal señaló que al menos 13 personas desarrollaron sintomatología antes, lo que sitúa la presencia del Covid-19 en nuestro país desde febrero con los pacientes “cero”. En este listado, sin embargo, no se consideró entre esos casos a la capital de Ñuble, limitándolos a las comunas de Calama, Ñuñoa, Linares, Concepción y Punta Arenas. Todos fueron confirmados como positivos luego de la realización del test.
Cambio en la metodología
Los casos de Covid-19 detectados a partir de febrero, quedaron en evidencia a partir del 15 de abril, cuando el Ministerio de Salud hizo un cambio en la metodología de reporte de casos; estos serían reportados en las 346 comunas del país, según la fecha de aparición de síntomas y no por la data de confirmación de diagnóstico, lo que reafirma que los “casos cero” se registraron en febrero de este año.
