Señor Director:
Llegó la hora. Ñublense se lo merece con creces. Un empate con Colo Colo nos clasifica, un triunfo es para soñar, pero no imposible, Colo Colo no pierde nada, Ñublense lo gana todo.
Justicia divina, como decía Julio Martínez. Es el resultado de la vil actitud curicana de no recibir a nuestra hinchada. Nuestra fuerza espiritual de lejos pudo más que recibir esta alevosa bofetada.
¡Bien Ñublense! Felicitaciones y ánimo, que falta muy poco para que suenen las bocinas en nuestra plaza de armas, que flameen las banderas, que el estadio se llene y que al unísono gritemos “Ñublense está clasificado”, resultado de una amalgama de humildad, fe y calidad futbolística.
Alejandro Escobar Z.
Exmédico de Ñublense
