La tarde del pasado 6 de noviembre, ante más de 8 mil espectadores en el estadio Nelson Oyarzún, Ñublense escribió uno de los capítulos más esperados de su historia.
Los diablos rojos clasificaron, por primera vez, en 106 años de existencia en el fútbol criollo, la clasificación a la Copa Libertadores de América, desatando un carnaval en la hinchada.
El equipo de Jaime García timbraba un logro histórico tras igualar 1-1 con Colo Colo, en un partido dramático que supo sostener hasta el último suspiro, casi sin piernas, pero un pundonor que conmovió a los fanáticos que llegaron al recinto de Pedro Aguirre Cerda.
Paralelamente, Curicó Unido, clásico rival al que le había ganado una semana antes, arrebatándole en La Granja, la opción de clasificar directo a la fase de grupos del torneo continental, solo igualaba con Coquimbo Unido, permitiéndole a los diablos rojos asegurar un cupo en la fase grupal.
Ñublense comenzó perdiendo en casa tras gol de Matías Zaldivia, quien puso en ventaja al “Cacique” al sorprender en el área tras un tiro de esquina.
Sin embargo, los dueños de casa golpearon de vuelta a la jugada siguiente, con una buena anotación de Nicolás Guerra tras asistencia de Patricio Rubio, que lo hizo definir sin dificultades ante Omar Carabalí.
En la segunda mitad la escuadra de Jaime García defendió más cerca de su área y le entregó la iniciativa al campeón del fútbol chileno, que igualmente no pudo encontrar el segundo gol, merced a la gran actuación de Nicola Pérez que protagonizó una tapada espectacular.
Carnaval
El pitazo final dio paso a un festejo masivo en la cancha, que incluyó a los familiares del cuerpo técnico y jugadores, y hasta de autoridades, encabezadas por el alcalde Camilo Benavente.
“Estoy muy contento porque el equipo se sacó la cresta y se lo merece, trabajamos duro para llegar acá”, comentó Jaime García, DT del Rojo.
“Esto es fruto del trabajo de equipo, la unión, la humildad. Contento porque me salió el gol para alcanzar luego el empate”, recalcó Nicolás Guerra. “Esperamos hacer una buena Copa Libertadores con Ñublense”, sentenciaba Patricio Rubio, mientras en la Plaza de Armas, los hinchas del Rojo daban vida a un carnaval que esperó por más de un siglo.
“Estoy feliz, lloro de emoción porque he seguido a Ñublense por Chile en las malas y esto es realmente histórico”, confesó llorando, Sergio Acuña. Ñublense selló la campaña como subcampeón del fútbol chileno, con 52 puntos, logrando el boleto directo a la Copa Libertadores, en la que será su primera experiencia en el máximo torneo sudamericano.
“Queremos ir a competir y no a participar”, sentenciaba García ante la ovación de la hinchada roja.
