En sus primeras palabras como presidente electo de Argentina, Javier Milei agradeció a quienes apoyaron su candidatura. Desde su comando, el economista aseguró que “este domingo comienza la reconstrucción de Argentina”, desatando una ovación entre sus partidarios.
Junto con agradecer a su hermana Karina, quien ofició como jefa de campaña, el líder de La Libertad Avanza se mostró satisfecho de llevar a la Casa Rosada a un “presidente liberal libertario”.
“Además quiero agradecer a Mauricio Macri y Patricia Bullrich por poner el cuerpo para defender el cambio que Argentina necesita”, sostuvo.
“Hoy comienza el fin de la decadencia argentina”, complementó posteriormente bajo los aplausos de sus adherentes.
En su alocución, Milei aseveró que “se ha terminado una forma de hacer política y comienza otra”, y cifró en 35 años los que necesita el país para ser de nuevo “potencia mundial”.
“No hay lugar para el gradualismo, no hay lugar para la tibieza, no hay lugar para las medias tintas”, sostuvo, aludiendo a las reformas estructurales que propone, pidiendo al gobierno de Alberto Fernández “que sea responsable”. En ese sentido, exigió además que “se haga cargo de su responsabilidad hasta el final del mandato”.
“Esta no es una tarea para tibios, cobardes ni mucho menos para corruptos, sino que para los que quieren poner de pie a Argentina”, lanzó.
El economista liberal y “libertario”, que en sus actos solía llevar en las manos una motosierra para representar el recorte del gasto público que propone, dijo que privatizará las empresas del Estado y reformará los sistemas de salud y educación, y propone eliminar el Banco Central y dolarizar la economía.
