Catorce exalumnos del Liceo de Hombres de Chillán fueron ejecutados y hechos desaparecer por la dictadura.
Bernardo Solís Núñez, de 20 años, junto a Carlos Lagos Salinas (20), Iván Contreras Flores (22), Patricio Weitzel Pérez (26), Ricardo Ruz Zañartu (35) y José Tohá González (47), fueron ejecutados o asesinados, mientras que desaparecidos permanecen Eduardo Crisóstomo Salgado (24), Humberto Cerda Aparicio (20), Luis Durán Rivas (29), Mario Melo Pradenas (27), Octavio Riquelme Venegas (29), Ricardo Troncoso Muñoz (26), Ricardo Lagos Salinas (24) y Washington Cid Urrutia (24).
A 50 años del golpe militar, sus nombres serán reconocidos a través en una placa conmemorativa que será colocada este viernes 8 de septiembre a las 16 horas en el frontis del establecimiento, en calle Claudio Arrau 755.
La iniciativa es promovida por un comité conformado para tales efectos por un grupo de exalumnos y profesores del Liceo Narciso Tondreau y materializada a través de un acuerdo suscrito el pasado 8 de agosto por el Concejo Municipal de Chillán.
“El Comité que se ha organizado para tal actividad, ha señalado que la conmemoración brinda la oportunidad de repensar estos acontecimientos y darles un significado que sirva como sociedad para prevenir nuevos crímenes de lesa humanidad, Se agrega que esta fecha invita a honrar la memoria nacional y afianzar una cultura de promoción de los Derechos Humanos y los valores democráticos que deben gobernar nuestro presente y futuro”, sostuvo la agrupación a través de una declaración.
“En ese contexto, se ha desarrollado un proyecto consistente en instalar, en el frontis del Liceo, una placa de conmemoración y recuerdo para 14 exliceanos que fueron duramente afectados en el periodo de la dictadura militar, para externalizar, hacia la ciudad, la memoria de los liceanos víctimas de ejecuciones y desapariciones forzadas. Se busca promover el aprendizaje y posibilitar la transmisión de la memoria, en la perspectiva de fortalecer una cultura y una práctica democrática, que se base en el respeto irrestricto a los derechos humanos”, agrega el comunicado.
El Comité sostiene que el memorial fomentará la imperiosa necesidad social de recordar lo sucedido en Chile, contribuyendo al fomento de una cultura de respeto y promoción de valores y principios que tienen como foco el irrestricto respeto de la naturaleza humana y recuperación de la dignidad y buen nombre de las víctimas de la represión, como parte fundamental del proceso reparatorio.
El golpe dio inicio a las violación a los DDHH
A juicio del Comité y con base en numerosos antecedentes oficiales, el golpe de Estado, que derrocó al presidente Constitucional de Chile, marca el inicio de las graves y sistemáticas violaciones a los derechos humanos como política de Estado, entre el 11 de septiembre de 1973 y el 11 de marzo de 1990, afirmación que se sostiene en múltiples fuentes y antecedentes, que en su conjunto devienen en verdad histórica irrefutable.
