El gobernador de Ñuble, Óscar Crisóstomo, junto al director regional de Conaf, Renzo Galgani, se reunieron en una mesa de trabajo con el presidente de Corma para las regiones del Biobío y Ñuble, Alejandro Casagrande, para dar a conocer la estrategia de prevención, detección y combate de incendios para la Región de Ñuble, anticipándose de esta manera a los desafíos que históricamente suponen las épocas estivales en esta materia.
El objetivo del trabajo colaborativo es aumentar las medidas de prevención para esta temporada y desarrollar acciones de disminución de riesgos en estas zonas que han estado marcadas por megadesastres, como el del 2012 que arrasó con más de 28 mil hectáreas, destruyendo bosques nativos, siembras, matando fauna y cobrando la vida de cuatro personas.
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Tras años de trabajos colaborativos y con una inversión de más de 14 millones de dólares para campañas preventivas en todo el país, las incidencias han sido menores, sin embargo, hay que considerar que a la fecha, tan solo en nuestra región ya se reportan 21 incendios forestales, de los cuales 11 se han producido en Diguillín, nueve en Itata y uno en la Provincia de Punilla, con una afectación de 394 hectáreas.
Conforme a investigaciones de la Conaf, la principal causa ha sido la negligencia en labores silvoagropecuarias, sumado a una disminución de la humedad del material vegetal fino muerto, lo que se traduce en mayor cantidad de material combustible disponible para la ignición, además de condiciones meteorológicas no habituales para esta época del año.
A la fecha van 392 ha afectadas, correspondiente a 15 veces más de lo registrado la temporada anterior.
En esta oportunidad, Alejandro Casagrande detalló que el sector privado tiene contemplado para esta temporada disponer de 11 aeronaves, 33 torres y cámaras de detección de incendios y más de 330 brigadistas para la Región de Ñuble.
A esto se debe añadir que en materia de recursos de Conaf, para este período a nivel nacional se dispondrán cerca de tres mil brigadistas y 62 aeronaves entre Atacama y Magallanes.
En el caso de Ñuble, se dispusieron 15 brigadas, cuatro aeronaves y una central de operaciones, además de recursos fijos y móviles para la detección y combate de incendios.
Todo ello, aparte del trabajo de coordinación con Bomberos y empresas forestales, además de la operación del protocolo con la Onemi para la movilización de recursos, dependiendo del tipo de alerta.
Educación, prevención y reacción
En la instancia, el presidente de Corma profundizó en el especial énfasis que tienen las empresas en prevención, donde la labor con las comunidades es fundamental.
“Actualmente la Red de Prevención Comunitaria tiene en Ñuble 30 comités dedicados a prevenir incendios, los que a la fecha han realizado más de 560 medidas, de las que el 45% corresponden a acciones preventivas, el 27% educación en prevención y el 28% acciones de reacción coordinada”, explicó.
Casagrande participó de una reunión de trabajo en Ñuble entre el Departamento de Prevención y Combate de Incendios de Corma, integrado por empresas asociadas y la Conaf, esto en el marco del plan de trabajo 2022/2023, conformando nueve mesas de trabajo, para abordan diversos temas entre los que destacó la detección de incendios, seguridad, capacitación y formación, operaciones aéreas, centrales de incendio, cordones de protección, entre otras.
En esta línea, Renzo Galgani, director regional de Conaf Ñuble, destacó “que durante todo el año mantenemos una línea de trabajo enfocada en estrategias para la prevención de incendios forestales, sumando actores públicos y privados, destacando el rol activo que tienen las instituciones del Estado, además de los municipios y las propias comunidades. Nos referimos a trabajos de educación ambiental, capacitaciones, autocuidado, construcción de cortafuegos, entre otras”.
Entendiendo que según los estudios hechos en el ámbito nacional se ha determinado que cerca del 90% de los incendios forestales y de pastizales son causados por personas, y de ellos, en casi un 80% se ha determinado intencionalidad, es que a estas mesas de trabajo también se ha incluido al Ministerio Público, como ente persecutor de los delitos.
Para estos efectos, Galgani se reunió el martes último con la fiscal regional, Nayalet Mansilla, y con el fiscal jefe de Bulnes, Rolando Canahuate.
La Conaf cuenta con el número de emergencia 130 para dar aviso en caso de un incendio forestal. También se puede llamar a Bomberos al 132. “Entre todos, podemos hacer frente a esta temporada, tener conductas responsables y recordar que prevenir un incendio forestal es más fácil que combatirlo”, cerró el director.
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