Un comportamiento diferente presenta la ciudadanía en Chillán y Chillán Viejo durante el período de cuarentena en términos de movilidad.
Los movimientos, entradas o salidas desde los hogares, difieren entre sectores geográficos de la intercomuna. Mientras los sectores nororiente y norte presentan menor movilidad, las zonas oriente y centro, presentan una mayor movilidad. Esto es explicado básicamente por la necesidad que tienen muchas personas de salir a trabajar en forma presencial principalmente hacia el centro de la ciudad.
Es la conclusión del último estudio sobre movilidad elaborado por el Instituto Sistemas Complejos de Ingeniería (ISCI), que integran profesionales de la Universidad de Chile, la Usach y la Universidad de Concepción (UdeC).
El análisis tomó como referencia la movilidad durante la primera cuarentena en la intercomuna, que se extendió entre el 30 de marzo y 23 de abril, comprándola con las semanas posteriores, hasta el mes de agosto.
“En la semana 13, al comienzo de cuarentena, los cambios son más notorios, y los flujos alcanzan disminuciones incluso mayores al 60%. Chillán Centro (principalmente comercial) y Chillán Norte (con presencia de grandes centros comerciales en la avenida Longitudinal Sur y terminal de buses) son las que más reflejan las medidas de cuarentena, al verse restringida las salidas de la población”, sostiene el estudio.
En contraparte, tras el término de la primera cuarentena (23 de abril) es posible notar un comportamiento diferente en la movilidad por sectores.
“Luego de la finalización de la cuarentena y cordón sanitario (semana 18), la movilidad de las salidas aumentan, aunque por debajo del observado en la semana base. Los sectores con mayor reducción de movilidad son Chillán Norte y Universidad; los sectores con mayor movilidad son Chillán Centro y Oriente. Este último, posee barrios residenciales de alta densidad residencial, y bajo nivel socioeconómico, situándose contiguo al centro, lo que sugiere una fuerte dependencia de esta zona por los servicios que posee”, establece el estudio.
¿Cómo se explica que al término de una cuarentena unos sectores presenten mayor movilidad que otros en una misma comuna?
“Uno pudiese concluir que la pregunta es porqué la gente se sigue moviendo y es porque hay gente que necesita moverse y no tiene la opción de teletrabajo y se ve obligada a salir, por eso la responsabilidad es que ese movimiento sea seguro para evitar un mayor contagio de Covid-19”, explica Sebastián Astroza, docente de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Concepción, uno de los autores del informe del ISCI.
Garantías para una efectiva cuarentena
La necesidad de movilidad de una parte de la ciudadanía que no puede realizar teletrabajo es un factor que puede llegar a restar efectividad a medidas sanitarias como la cuarentena.
“Muchas veces se analiza con simpleza diciendo que los que salen a la calle lo hacen porque son inmaduros, rebeldes o no empatizan, pero pocos se han dado a la tarea de preguntarles por qué siguen circulando”, sostuvo Ximena Aguilera, especialista en Salud Pública e integrantes del Consejo Asesor Covid 19, durante una exposición frente a las comisiones de Salud y Desafíos del Futuro, Ciencia, Tecnología e Innovación en el Senado.
En la ocasión, la investigadora de la unidad de Asesoría Técnica Parlamentaria de la Biblioteca del Congreso (BCN), María Pilar Lampert, se preguntó: ¿a qué se debe que en algunos lugares la población acata las cuarentenas y en otro no? “Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las personas harán caso de las medidas de confinamiento cuando sus necesidades básicas se encuentren satisfechas (alimentación, abrigo, trabajo), las políticas de salud mental estén consolidadas en todos los niveles y exista una comunicación efectiva por parte de las autoridades”, explicó.
“Quiero destacar a Nueva Zelanda donde la salud mental y la comunicación efectiva son evidentes. En esta nación mientras existió cuarentena, todas las semanas las personas debían responder una encuesta sobre cómo se sienten en esta especial situación y si la información que se les entregaba era útil”, afirmó.
Para Pía Mundaca, directora ejecutiva de Espacio Público “las personas salen respetando las reglas establecidas por la autoridad, por lo tanto hay que generar un nuevo diseño de cuarentena -desde lo estructural- que realmente permita que las personas se queden en sus casas de forma mayoritaria, para que el confinamiento sea la norma y no una excepcionalidad”.
