“Creo que tenemos que modificar el presupuesto municipal 2020 e integrar más elementos sociales”, planteó ayer el presidente de la Comisión Hacienda del Concejo Municipal, el edil de la democracia Cristiana Patricio Huepe.
Imbuidos por los acontecimientos que han ocurrido en los últimos días en el país, la propuesta busca “aterrizar” en la medida de lo posible y según lo que permita la gestión municipal y las arcas consistoriales, la sensibilidad social que se impone a nivel nacional y que se transmite de manera transversal en la ciudadanía.
Propuso el representante de la DC revisar los presupuestos de los departamentos municipales, con el fin de analizar cuáles partidas pueden ser modificadas para incorporar aspectos de relevancia vecinal.
Siguiendo la lógica de generar un presupuesto de corte más “social”, el concejal Víctor Sepúlveda planteó que la Municipalidad debiera entregar más recursos para “responder efectivamente frente a la necesidad de mediaguas de personas que pierden sus casas tras incendios, toda vez que a veces hay demoras de meses para ese servicio”.
Además, planteó revisar diferentes ámbitos del accionar de la Dirección de Desarrollo Comunitario (Dideco), organismo que basa su accionar estrechamente con la comunidad y sus necesidades más inmediatas, como entrega de ayudas sociales y mediaguas.
El concejal Joseph Careaga (UDI) expuso que el municipio tiene que tener una atención expedita hacia los que viven postrados y adicionalmente apurar la entrega de ayudas técnicas como lentes, audífonos, sillas de ruedas, bastones, “pues no he visto que hayamos entregado esos elementos en el último tiempo”.
¿Fin a los parquímetros?
El concejal Jorge Vaccaro, agregó que frente a esta nueva visión de la sociedad que surgió explosivamente, la Municipalidad debe revisar la continuidad del pago de parquímetros, los cuales “están entre los más caros del país”.
Sobre el particular, el alcalde Sergio Zarzar planteó que no se trata de un modelo que firmara su administración, sino que venía desde mucho tiempo y existe un contrato que este gobierno comunal debe cumplir. Le restan 15 años.
La concejala Brígida Hormazábal (PS) subrayó que el consistorio debiera realizar un reordenamiento de la Dideco para reimpulsar programas que parecen estar subutilizados, como es Vivienda.
En tanto, Camilo Benavente (PPD) agregó que la reingeniería no debe ser solo del Presupuesto Municipal 2020, sino que se debe dirigir hacia la manera en que el gobierno comunal se hace cargo de las demandas ciudadanas, lo cual pasa por modificar la gestión interna, incorporando proyectos e ideas que los concejales han planteado desde hace varios años y que no han sido aceptadas por las autoridades.
Aprobación
El presupuesto será analizado de manera permanente por el concejo y los departamentos de la entidad municipal, que debe aprobarlo a más tardar el 15 de diciembre próximo.
El documento, emanado desde la Secretaría de Planificación (Secpla), establece que la entidad edilicia dispondrá durante el período comprendido en el marco presupuestario un total de $36.074.363, superior a la de este año, que llegó a los $33.169.674 y que representa un incremento de 8,75%.
A los recursos con los que contará el gobierno comunal se deben sumar los del saldo inicial de caja, que corresponde a los remanentes del período en ejecución y cuyo monto aún no es posible estimar, aunque llegaría a $40 mil millones.