Un helicóptero en el que viajaba el presidente de Colombia, Iván Duque, y sus ministros de Interior y de Defensa, fue atacado a tiros cuando se disponía a aterrizar en la ciudad de Cúcuta, capital del departamento de Norte de Santander, fronterizo con Venezuela, pero el mandatario y demás ocupantes de la aeronave resultaron ilesos.
“Tanto el dispositivo aéreo como la capacidad de la aeronave evitaron que ocurriera algo letal. Lo cierto es que es un atentado cobarde donde se ven impactos de bala en la aeronave presidencial”, confirmó el propio presidente en la mencionada urbe.
El presidente detalló que en la aeronave también viajaban los ministros de Defensa, Diego Molano, y del Interior, Daniel Palacios, además del gobernador de Norte de Santander, Silvano Serrano.
“Luego de cumplir un compromiso en Sardinata, en el Catatumbo colombiano, y aproximándonos a aterrizar a la ciudad de Cúcuta, el helicóptero presidencial fue víctima de un atentado”, subrayó el mandatario.
El presidente estuvo en Sardinata, donde presentó avances del programa “Paz con legalidad” relacionado con la implementación del acuerdo firmado en noviembre de 2016 con la guerrilla de las FARC, informó radio Cooperativa.
En la convulsa región del Catatumbo tienen presencia la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN); un reducto del Ejército Popular de Liberación (EPL), considerado por el Gobierno como una banda criminal; disidentes de la extinta guerrilla de las FARC y grupos narcotraficantes que se enfrentan por el control territorial.
“Una vez más reiteramos que como Gobierno no vamos a desfallecer un solo minuto, un solo día, en la lucha contra el narcotráfico, el terrorismo y los organismos de criminalidad organizada que operan en el país. Aquí no nos amedrentan con violencia ni con actos de terrorismo, nuestro Estado es fuerte”, expresó Duque.
Por ello ordenó a todo “el equipo de seguridad de ir detrás de quienes dispararon contra la aeronave y pusieron en riesgo la vida de otras personas”.