Preocupación existe entre algunos concejales y vecinos de barrios de Chillán, como la villa Doña Francisca o del sector de la Colonia Bernardo O’Higgins, por el deterioro que las lluvias de este mes han dejado en los caminos que habían sido reparados o incluso construidos recientemente por la Municipalidad de Chillán.
Algunas de las solicitudes de mejoras llegaron al concejal Rodrigo Ramírez, quien expuso el tema en la reunión de concejo municipal del día de hoy martes.
“El gran problema que tenemos son con los caminos rurales que no están todavía pavimentados al cien por ciento, porque se les hacen mantenciones, se les pasa la máquina, pero cae la lluvia y se vuelven a romper”, dijo.
Para el concejal, esto demuestra que “es urgente tener una o dos máquinas más, porque esto no pasa por falta de trabajo sino que es que con la maquinaria que se cuenta, la planificación no puede ir más rápido”.
Maricarmen Olave, quien vive en el sector de Cato Alto, confirma que “con las lluvias el camino se deterioró bastante, quedaron muchos baches. Lo arreglaron entre fines del año pasado y principios de este, pero ahora nos resulta difícil pasar, algunos autos raspan abajo, sobre todo en las noches porque como no es un camino iluminado, es imposible ver los hoyos”.
Desde la Secpla, el jefe de Planificación, Carlos Araya, explicó que hay proyectos vigentes de mejoras en varios de estos caminos, que ya se han presentado al Serviu.
“Una vez que tengamos el visto bueno del Serviu, podremos licitar con recursos municipales algunas de estas mejoras. Por ejemplo, el de Doña Francisca, contempla recursos por cerca de $200 millones”.
Sobre otros casos, como el camino del sector de Colonia Bernardo O’Higgins, que también ha sufrido deterioros, añade que “ahí se está ejecutando un proyecto que contempla cerca de 400 metros; y en otros sectores donde se generaron bacheos y otro tipo de daños, está contemplado seguir trabajando con bacheadora, solamente”.
Proyecto del Gobierno Regional
Conforme a las estimaciones municipales, poder pavimentar al menos los tramos de mayor tráfico que se encuentran en esta situación, se requiere de a lo menos $1.000 millones, por lo que no es posible proyectar esa solución ideal en todas los sectores.
A pesar de lo anterior, sí destacan que han ido avanzando, por ejemplo en la pavimentación del excamino a Coihueco, que conduce a la villa San Miguel, quienes por cerca de 15 años tuvieron un acceso de tierra de un kilómetro de largo.
Y aunque sí existe en el Secpla una agenda de reparaciones para aminorar al máximo estos desperfectos, se está a la espera de que se concrete un proyecto para poder dotar a la unidad municipal de nueva maquinaria.
“Con el Gobierno Regional se está viendo la posibilidad de comprar una tercera motoniveladora”, advierte el concejal Ramírez.
Por lo demás, otros arreglos como los que urgen en la Avenida Alonso de Ercilla podrían ser objeto de un proyecto mayor cuando lleguen los cerca de $1.000 millones que le corresponden a Chillán por concepto del royalty minero anunciado a fines del mes de abril.
